El año 1964 comenzó con una noticia estremecedora: la joven Catalina Reyes, recientemente secuestrada, logró escapar de sus captoras y ayudó a destapar a Las Poquianchis, uno de los primeros casos de trata de personas y feminicidios en serie en México, además de convertirse en uno de los crímenes más mediáticos hasta ese momento.
‘Las muertas’, el libro que más trabajo le costó escribir a Jorge Ibargüengoitia

Para 1965 el autor guanajuatense Jorge Ibargüengoitia escribió El libro de las Poquianchis, una historia narrada a modo de crónica basada en hechos reales. Este fue un primer borrador del libro Las Muertas , que finalmente publicó poco más de 10 años después.

‘Las Muertas’, el libro por el que Jorge Ibargüengoitia dijo “estoy escribiendo muy mal”
Para el escritor, “el proceso de creación de la novela Las Muertas fue el más largo y tortuoso de su carrera”, explica el doctor Alejandro Lambarry en un artículo publicado en la Nueva Revista de Filología Hispánica del Colmex.
Y es que, a diferencia de otras novelas, este libro tiene al menos cuatro borradores escritos a lo largo de 13 años y que, además de investigación, requirió un apoyo constante de la pintora Joy Laville, su esposa.
De hecho, desde que lo inició hasta que finalmente fue publicado en 1977, Ibargüengoitia publicó otras novelas como Maten al León (1969) y Estas ruinas que ves (1975).
La primera versión, llamada El libro de las Poquianchis, tiene una voz narrativa similar al cuento de La ley de Herodes: autobiográfica, sencilla, irónica y con lenguaje coloquial y, según explica el académico, “utiliza las convenciones de la autobiografía para establecer un puente entre la realidad y la ficción que permite, a su vez, leer este texto bajo una clave de verdad”.

Pero conforme avanzó en la escritura se dio cuenta que no era la voz que quería utilizar. En cartas enviadas a Joy Laville, explica los cambios que quiere hacer, el deseo que hacer que el narrador tenga una voz sólida y constante.
El proceso se alargó tanto que en una carta enviada a la pintora en 1972, Ibargüengoitia aseguró que “estoy escribiendo muy mal, leyendo peor y, en general, jodido”.
Finalmente, la novela se publicó en 1977 en la colección Nueva Narrativa Hispánica con una voz narrativa en tercera persona y, como dice Lambarry, el referente histórico de la historia real de las Poquianchis se pierde puesto que los nombres se cambian, en la vida real las hermanas González Valenzuela cometieron los crímenes y en el libro son las hermanas Balandro, los hechos se sitúan en Cuévano –un lugar imaginario– y la voz de los personajes se intercalan con la del narrador.
Estoy escribiendo muy mal, leyendo peor y, en general, jodido
“Si hubiera sido Truman Capote, hubiera ido y entrevistado a todo el mundo, y obtenido muchas grabaciones, pero soy malo en eso, soy muy tímido. Así que inventé a los personajes, son composiciones de imágenes de distintas personas que conozco”, dijo en una entrevista para The Guardian en 1983, cuando se publicó la novela en inglés.
‘Las muertas’, el próximo estreno de Netflix
La novela de Ibargüengoitia se estrenará el 10 de septiembre en Netflix. Dirigida por Luis Estrada, es protagonizada por Paulina Gaitán y Arcelia Ramírez como las hermanas Baladro, Joaquín Cosío como el capitán Bedoya, y Alfonso Herrera como Simón Corona.