La era de las redes sociales tal y como las conocemos comenzó en 1995 con el lanzamiento de classmates.com, pero la consolidación no llegó sino hasta 2004 con Facebook. Han pasado más de 15 años de su fundación y el canal de interacción creado por Mark Zuckerberg se mantiene firme como la red social dominante en un mercado cada vez más saturado y que incluye competidores como YouTube, Instagram o Twitter. Nadie ha podido con él, al menos hasta ahora, pues su hegemonía parece verse amenazada por primera vez en mucho tiempo ante el auge TikTok.
¿Termina la era Facebook e inicia la era TikTok?
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El servicio propiedad de la empresa china ByteDance se ha convertido en la app más descargada en el mundo en el 2020, seguida de Facebook, WhatsApp, Instagram y Facebook Messenger. Sí, todas propiedad de Zuckerberg. La hazaña que se torna aún más impactante si consideramos que la función de la red se limita a compartir videos cortos que van de los tres segundos al minuto, que el año pasado se encontraba en la cuarta posición de esta misma lista y que su debut fue apenas en 2016. O lo que es lo mismo, sólo necesitó cuatro años para usurpar un auténtico imperio tecnológico.
A esto se suman factores sociopolíticos, como los esfuerzos de Donald Trump en el mismo 2020 por prohibir la descarga de TikTok en territorio estadounidense al considerar un riesgo para la seguridad nacional que los usuarios compartieran información con una empresa china. La orden fue revocada por Joe Biden el pasado mes de junio.
Mención aparte para la popularidad. TikTok se ha convertido en un canal indispensable para la viralización de contenidos de celebridades e influencers, lo que no ha pasado desapercibido para Netflix que ya trabaja en el lanzamiento de Hype House, un reality show centrado en el colectivo homónimo de la red social. Todo esto mientras Facebook es cada vez más relegado al uso personal.
Este meteórico ascenso ha provocado que algunos se pregunten si el dominio de Facebook se acerca a su fin ante el potencial inicio de la era TikTok. Puede ser, pero no nos precipitemos tanto, que los números indican que todavía falta un buen rato para que esto suceda.
El fenómeno cultural Facebook
El ascenso de TikTok no ha sido indiferente para Zuckerberg. Así lo demostró un audio filtrado en 2019 que registró su opinión de la joven red a la que describió como “un fenómeno muy interesante”, reveló The Verge . Ese mismo año empezó a ingresar cantidades que iban entre los 7 mil mdd y los 8 mil 400 mdd.
Pero si de fenómenos tecnológicos se trata, nadie como Facebook. El sistema demostró su potencial desde su primer día, con la suscripción de más de 1 mil 200 personas en sus primeras 24 horas de operación. Hoy día se mantiene firme como la red más importante al contar 2 mil 850 millones de cuentas activas en el mundo. Muy atrás le siguen YouTube (2 mil 291 millones), WhatsApp (2 mil ) millones e Instagram (1 mil 386 millones). Más lejos aún está TikTok, con apenas 732 millones de cuentas.
Aunque buena parte de su éxito ha sido atribuido a la capacidad de Mark Zuckerberg para crear un producto fácil de usar y sumamente maleable, numerosos especialistas aseguran que su verdadero impacto recae en factores humanos. Esto incluye aspectos tan sencillos como el uso de la palabra “amigos” por encima de “contactos”, o un cuadro de posts que nunca aparece vacío, sino que pregunta “¿qué estás pensando?”.
Esto ha provocado que Facebook se convierta en una “parte integral de cómo la gente se conecta y comunica con el mundo alrededor”, según asegura la psicóloga Liraz Margalit . “Nuestros perfiles son microreflejos de nuestro auto-esquema […], un modelo que organiza información sobre nosotros mismos y refleja lo que pensamos, nos gusta y a lo que dedicamos tiempo y energía”.
La especialista considera que el impacto es tal que incluso ha cambiado la comunicación no verbal, ya que el modo convencional se torna imposible en el terreno online. La nueva modalidad implica información que ayuda a crear impresiones de otros usuarios, lo que incluye el número de amigos, la educación y el trabajo, la estabilidad de las relaciones, una redacción recurrente de posts que sugiere extroversión, el uso continuo del me gusta como esfuerzo de integración social e incluso el apoyo a causas palpables en marcos creados para las fotos de perfil. Facebook lo dice todo.
No es el caso de las aplicaciones que se limitan al terreno visual. Tal es el caso de Instagram, señalada en reiteradas ocasiones por la publicación de imágenes truqueadas que distorsionan la realidad ante los ojos de los usuarios. Una tendencia común y que incluso ha provocado problemas de autoestima en numerosas personas, siendo los jóvenes los más afectados. TikTok ya ha generado sus primeros debates al respecto, con la publicación recurrente de bailes que presuntamente promueven la sexualización y de challenges tan cuestionables que han dejado gente en prisión e incluso víctimas mortales.
Nadie puede negar que TikTok es una nueva historia de éxito en el terrero de las redes sociales y que su rápido ascenso le ha dado justamente la etiqueta de fenómeno. Pero todavía falta mucho para que pueda ponerse al nivel de Facebook, una red cuya trascendencia va más allá del número de usuarios y realmente debe medirse a través de su enorme legado.