Una generación que trabaja sin guion
Estos candidatos millenials aparecen en todos los medios y son relevantes simplemente porque son divertidos, se equivocaron en el discurso o simplemente son muy atractivos para el estándar de los políticos mexicanos.
“Este fenómeno del auge de las redes sociales, ya han llegado hasta ofrecernos nuevos estereotipos de personajes políticos”, comenta Laura Puente, consultora especialista en imagen y estrategia política.
Aunque podemos hablar del paso de estafeta generacional, como siempre ha ocurrido, para esta generación las herramientas de las redes sociales pueden dar una lectura mucho más inmediata y previa a un gran mitin (que si bien ahora no están permitidas las grandes aglomeraciones) resuelven de un plumazo la discusión numérica de la relevancia de un aspirante político contra otro.
“Sería tan simple como decir que se están dando nuevas oportunidades a los jóvenes, pero no es solo eso. Las redes sociales ya tenían influencia en gran parte de nuestro día a día, por lo cual ahora funcionan como una herramienta más de trabajo. Actualmente pueden ser determinantes para el resultado de una elección”, reflexiona Puente respecto al fenómeno.
Aunque podríamos hablar de una ventaja generacional o una creación del candidato ideal, esto no es así, opina José Manuel Urquijo, analista y estratega en comunicación política.
“Todos los partidos han ido incluyendo esta imagen hegemónica del candidato ideal, con la apariencia de un profesionista exitoso (con toda la parafernalia de vestuario que esto implica), un manejo en redes sociales y un compromiso de servir”, señaló en entrevista para Life and Style. Para el analista estos escenarios son ficticios y juegan un papel de comunicación al ser personajes que lucen cercanos por lo que proyectan a través del “personaje” de sus redes sociales, saliéndose del discurso siendo dicharacheros y teniendo un contexto más cercano a su entorno inmediato.