'Call of Duty: Black Ops 4', el título que debes jugar si odias 'Fortnite'

Call of Duty: Black Ops 4 es el primer título de la serie, que contrario a concentrarse en un modo de campaña con historia de guerra o fuerzas especiales militares profunda para un solo jugador, da prioridad a los modos de multijugador en línea bajo tres módulos centrales: multijugador clásico y especialistas, el ya famoso modo de supervivencia Zombies y un nuevo modo tipo Battle Royale llamado 'Blackout', que invita al jugador a competir en escuadrones o en solitario contra otros 100 jugadores en un mapa abierto cuya área de juego se cierra conforme la partida avanza, similar a juegos como Fortnite y PUBG.

Para aquellos jugadores que conocen la serie no se sentirán decepcionados de que el desarrollador Treyarch no modificara los mecanismos de juego, el armamento detallado y realista, los controles ágiles y tipo de multijugador que han hecho de CoD una franquicia valorada en más de 11,000 millones de dólares.

Black Ops 4 es un juego que mantiene el rápido y ágil movimiento de control, combinados con arsenal altamente completo, que como siempre es amplio y da una enorme variedad a las batallas. Elementos que mantiene el jugador al borde de su asiento en cada instante de la partida y que además lo obliga a subir su nivel para mantenerse a la par de otros jugadores en línea de forma constante, siendo en varios momentos altamente adictivo.

En esencia es como si se tratara de tres videojuegos en uno, dado lo diferente que son sus modos de juego . De todos, el modo multijugador clásico es el menos impactante porque en esencia es el que menos propone.

El modo de juego Zombies es el más completo y divertido de toda la serie de CoD, no sólo porque Treyarch mantiene la esencia de lo que ha hecho ese modo de juego tan famoso, sino que lo mejora con retos, nuevos armamentos, modificadores a los personajes combinado con una historia de acción rápida y altamente intensa.

Sin embargo, donde Activision pudo haber encontrado el futuro de la franquicia es en el modo de Blackout.

Treyarch no inventó el hilo negro en el mundo de los Battle Royale, es más ni siquiera lo intentó, porque Blackout es esencia Fortnite o PUBG pero con los controles, ritmo acelerado, realismo, mapas e inmenso arsenal de Call of Duty. Pero vale la pena porque son esos elementos los que hacen de 'Blackout' un digno adversario para robar jugadores de Fortnite y pasarlos a sus filas.

Contrario a sacar ventaja de otras habilidades como construir estructuras, 'Blackout' se concentra en una batalla que demanda precisión, buenos reflejos, excelente puntería, aprovechamiento de los escenarios, y conocimiento en los diferentes tipos de armas y sus ventajas o desventajas en los combates a corta o larga distancia.

El modo de progresión, a cambio de modificadores o el desbloqueo de ciertas armas, invita al jugador a seguir compitiendo, incluso después de más 130 partidas y el mapa no solo es amplio y diverso, sino que también está armado con elementos de otros mapas de previos Call of Duty, lo cual es un buen gesto para los jugadores que han seguido la franquicia desde hace varios años.

Sin duda no es perfecto, para aquellos acostumbrados a otros Battle Royale, mecanismos como el menú del inventario, la modificación de armamento en plena batalla o el recolectar serán un dolor de cabeza.

Es complicado ver cómo Activision mantendrá vivo y vigente algo como Blackout conforme progresan los meses, pues la empresa siempre se ha concentrado en vender bajo el modelo de pago por software , es decir pagar por el juego. Mientras que firmas como Epic, creadores de Fortnite, han aprendido a dominar el modelo freemium en el que conforme progresan las temporadas el jugador tiene la posibilidad de seguir jugando sin pagar un solo peso, pero con la habilidad suficiente de convencerlos de gastar mucho dinero por vestimenta o accesorios.

A pesar de ello, si el cometido de Activision con Black Ops 4 era refrescar lo agotado de una franquicia como Call of Duty, que este año cumple 18 años de vida, en esencia lo han logrado. Habrá que esperar para saber si el cambio es lo suficientemente bueno para sobrevivir a los primeros meses de euforia.