La otra 'competencia' en París 2024: conseguir boletos para las pruebas

Los organizadores de los Juegos Olímpicos desarrollaron una app específica para la compra y reventa de boletos para todas las competencias, con la excepción del surf, que se lleva a cabo en Tahití, a más de 13 mil kilómetros de distancia de Francia. Sin embargo, la plataforma tiene problemas para mostrar correctamente el número de boletos disponibles, la fila de espera virtual puede ser larga y los boletos de reventa prácticamente son imposibles de comprar.

La aplicación muestra con frecuencia que hay algunos boletos disponibles para ciertas disciplinas, pero al ingresar a su compra resulta que no hay existencias. Por ejemplo, la tarde del 1 de agosto la aplicación mostraba disponibilidad para el partido de baloncesto entre España y Canadá, pero al ingresar a la compra todas las secciones se encontraban completamente vendidas.

Para evitar la reventa ilegal, los organizadores facilitaron también una plataforma para el mercado secundario de boletos, pero varios usuarios también se han frustrado con ella.

“No pude comprar un solo boleto y aquí dice que hay cuatro disponibles”, dice Antonio Costa, un aficionado italiano que a las afueras del estadio Champ de Mars buscaba entradas para la prueba de tiro con arco. “Llevo tres horas refrescando la página para lograr conseguir entradas”.

Hallar disponibilidad de más de un boleto en la reventa legal es también una tarea complicada, pues generalmente solo se ofertan entradas individuales, por lo que parejas o familias enteras no ven la plataforma como una opción sólida.

Otro problema de la plataforma de que aunque haya disponibilidad, al momento de intentar pagar la entrada el sitio asegura que por el momento no es posible finalizar la compra y es necesario intentar más tarde, esto incluso para eventos que ya arrancaron.

Más allá de los problemas técnicos, los boletos para París 2024 dejarán bastante gastados a los aficionados a ciertas pruebas. Si bien los partidos futbol tiene precios que arrancan en los 15 euros, la mayoría de las pruebas alcanzan las triples cifras.

Por ejemplo, la prueba final para tiro con arco ronda los 153 euros, mientras que la final de gimnasia de trampolín, los 239 euros.

Las pruebas preliminares de atletismo arrancan en los 350 euros, mientras que algunas finales de natación se han colocado en los 900 euros.

“Hicimos el gasto porque es una experiencia que a lo mejor no volvemos a repetir”, afirmó Gastón Suárez, un aficionado colombiano quien con su novia pagó 280 euros cada uno para la final de esgrima por equipos. “Pero sí es muy caro, es un evento pensado para el primer mundo”.