Max Verstappen, el actual (y triple) campeón del mundo en la Fórmula 1, dijo que no tiene ninguna razón para abandonar a su equipo Red Bull, a pesar de las últimas declaraciones que dio su papá sobre Christian Horner, jefe de la escudería.
Justo antes del Gran Premio de Arabia Saudita, que se correrá este fin de semana, el piloto aseguró que cumplir con su contrato, que concluye en 2028, “siempre ha sido su intención”.
“Estoy feliz en el equipo. Mientras rindamos bien no tendré ninguna razón para irme”, dijo Verstappen para apaciguar los rumores sobre que podría irse al equipo de Mercedes una vez que Lewis Hamilton inicie la temporada 2025 con la escudería Ferrari.
Sin embargo, Red Bull domina por completo la pista desde hace dos años. Tan solo en 2023, el equipo ganó 21 de 22 carreras, sin embargo la escudería atraviesa por algunos problemas internos, pues Christian Horner fue señalado de “comportamiento indebido” por una empleada de la empresa y, aunque fue absuelto, su permanencia no es apoyada por todo el equipo.
Pocas horas después de que Max Verstappen ganó el Gran Premio de Bahrein, su padre Jos Verstappen arremetió contra Christian Horner.
El expiloto neerlandés dijo al Daily Mail que “hay tensión (en el equipo) mientras Horner siga en el puesto. El equipo corre el riesgo de desgarrarse. No puede continuar así, va a reventar”.
Sin embargo, a pesar de las palabras de su padre, Max Verstappen asegura que permanece ajeno a esa situación.
“En Bahrein no afectó al rendimiento del equipo. En la situación ideal un equipo prefiere no tener que pasar por esos momentos, pero yo sigo concentrado en mi trabajo, que es rendir en la pista”.
Al tricampeón del mundo se le preguntó su opinión sobre las declaraciones de su padre, a lo que respondió que “no tiene importancia estar de un lado o de otro. Como hijo de mi padre sería raro no estar de su parte, pero solo quiero concentrarme en el rendimiento”.
