¡Verde Navidad! Cómo hacer sostenible esta temporada

La Navidad, sin embargo, tiene dos caras y, en ocasiones, tendemos a pasar por alto su lado menos brillante. Según la empresa recolectora de basura Seredecom, cada mexicano produce entre 800 gramos y un kilo de basura al día, cifra que se eleva hasta los 1.75 kilos durante las fechas navideñas. Una capital como la Ciudad de México, con una población de 8.9 millones de habitantes, producirá durante la Navidad 15 millones de toneladas al día, un problema de grandes dimensiones.

La pregunta es: ¿hasta cuándo continuaremos generando tanta basura durante diciembre? Y, aún más importante, ¿qué medidas podemos tomar para enfrentar esta problemática?

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La solución es complicada, máxime si tenemos en cuenta que es imposible controlar todo lo que rodea al consumo desenfrenado de esos días, desde los regalos y sus envolturas, la decoración y la ropa que compramos para los compromisos sociales, hasta la comida desperdiciada o la energía consumida. La lista puede ser interminable, de ahí la necesidad de plantearnos una Navidad sostenible.

La buena noticia (en ocasiones también mala) es que somos muchos, algo que nos da poder, ya que, si nos basamos en El Kybalión y su principio de polaridad, la solución está en nosotros mismos. Un ejemplo: calor y frío, aunque opuestos, pertenecen a la misma cualidad, de ahí que el valor de las pequeñas acciones y contribuciones cobre una importancia crucial. Cada decisión, multiplicada por millones, se convierte en una acción con poder real. Por este motivo, nos dimos a la tarea de pensar e identificar pequeñas acciones capaces de crear un impacto positivo en la manera en la que disfrutamos de esta época.

1. Compra regalos sabiamente
Una opción a considerar es la creación de regalos hechos a mano, pero si no eres ese tipo de persona, busca aquellos fabricados con materiales reciclados o sostenibles. Regalar piezas de marcas mexicanas, cuya producción es más controlada y bajo un esquema más justo, puede ser una forma gratificante de mostrar afecto.

Si estas en la capital, considera darte una vuelta por concept stores en Polanco, la Roma o la Condesa como Ikal, Lago, Home Roma, Querencia, The Happening y Onora Casa, con opciones que por lo general apoyan técnicas tradicionales. También puedes pensar en regalos consumibles, como alimentos gourmet o vinos orgánicos; productos que no generan residuos innecesarios y que promueven el apoyo a los productores locales y la agricultura sostenible.

Otras opciones son los obsequios digitales. Regala música, libros electrónicos, películas, videojuegos o suscripciones a servicios en línea. Incluso puedes optar por las tarjetas-regalo. Otro muy buen detalle son las plantas en maceta: aportan buena vibra a cualquier casa y son camaleónicas.

2. Envuélvelos pensando en el mundo
Siempre existe la opción de reciclar. Puedes guardar las cajas de cartón en las que te llegan tus pedidos para usarlas más tarde como envoltura. Si lo deseas, usa papel kraft para envolver la caja y coloca un moño de algún listón que hayas reciclado. El cartón es biodegradable y se descompone naturalmente en el medioambiente con el tiempo. Un plástico, en cambio, puede permanecer en el planeta durante cientos de años sin descomponerse por completo.

Según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), la tasa de reciclaje de cartón corrugado supera el 80 por ciento, mientras que la tasa de reciclado de plásticos apenas alcanza el 8.7 por ciento. Además, la producción de cartón requiere menos energía. Para finalizar, si no tienes a la mano ningún listón que puedas reciclar, puedes incluir materiales orgánicos.

Pon una ramita de pino junto a una tarjeta con dedicatoria y te aseguramos que tendrá el toque navideño que estás buscando. Otra opción es hacer una búsqueda en Pinterest de “envolturas sostenibles”. Telas que no uses y hojas de revista o periódico aparecen entre las opciones más estéticas.

3. Disminuye tu consumo de energía
Una de las formas más eficientes de reducir el consumo de energía durante la Navidad es cambiar las luces tradicionales por luces LED. Un foco incandescente pierde el 80 por ciento de su energía en forma de calor, usando el restante para la emisión de luz, mientras que la luz LED funciona de manera inversa y cuenta con una vida útil mucho más larga, lo que no solo reduce el gasto, sino que también disminuye la necesidad de reemplazarlas en los próximos años.

Asimismo, también te recomendamos usar temporizadores y reguladores de intensidad para bajar tu consumo o la opción de usar velas en reuniones pequeñas (en donde puedas estar al pendiente) para darle a tus fiestas un toque romántico y un ambiente acogedor.

Estas pequeñas acciones pueden servir como punto de partida para disfrutar de una Navidad más sostenible y comprometida con el medioambiente. Cada elección cuenta, así que cada granito de arena, sumado a otros millones de granitos, puede marcar una gran diferencia en nuestro entorno y el mundo en general.

Además de estas sugerencias, puedes considerar otras maneras de contribuir a un mundo más amoroso donando lo que ya no necesitas. En lugar de acumular más piezas en tu armario, considera sacar lo que ya no usas y regalarlo a organizaciones benéficas locales o a personas necesitadas. Puede ser ropa, juguetes, alimentos no perecederos o cualquier otro artículo en buen estado. Tu donación tiene el potencial de cambiarle la vida a alguien menos afortunado.

Y por último, al planear las cenas navideñas te animamos a cuidar los detalles. Por ejemplo, usar vajillas reutilizables de vidrio o cerámica en lugar de desechables de plástico o unicel. Esto reducirá significativamente nuestro volumen de desechos.

La Navidad es un momento maravilloso para compartir con tus seres queridos. Aprovecha para cerrar el año construyendo un mundo mejor y así poder iniciar el 2024 con la mejor versión de ti mismo.