Varias escuadras europeas se han pronunciado contra las condiciones de los derechos humanos en el país sede. Se ha hablado desde boycotts hasta pronunciamientos por parte de jugadores.
Sin embargo, este miércoles destacó el caso de la Selección de Alemania al momento de posar para la foto conmemorativa - aunque seguramente los alemanes querrán olvidar ese resultado - del encuentro contra su similar de Japón.
"Esto no está bien, cómo se presiona a las federaciones", dijo Nancy Faeser, ministra del Interior de Alemania, durante una visita a un evento de la asociación alemana de fútbol en Doha antes del partido.
"En los tiempos que corren es incomprensible que la FIFA no quiera que la gente defienda abiertamente la tolerancia y esté en contra de la discriminación. No encaja en nuestros tiempos y no es apropiado para la gente".
La Federación Alemana de Fútbol (DFB) expresó en un comunicado: "Queríamos utilizar el brazalete de capitán para defender los valores que mantenemos en la selección alemana: la diversidad y el respeto mutuo. Junto con otras naciones, queríamos que se oyera nuestra voz".
"No se trataba de hacer una declaración política: los derechos humanos no son negociables. Eso debería darse por sentado, pero todavía no es así. Por eso este mensaje es tan importante para nosotros. Negarnos el brazalete es lo mismo que negarnos la voz. Mantenemos nuestra posición".
En el caso de Alemania este tema es particularmente sensible puesto que su portero titular y campeón del mundo, Manuel Neuer, ha declarado en repetidas ocasiones su apoyo a la población LGBT+.
Días antes de iniciar el Mundial, siete selecciones decidieron que no usarían el brazalete que contenía la leyenda "Love", con la que buscaban visibilizar el problema que enfrentan las minorias sexuales en esa nación, en la que la homosexualidad es ilegal, pero aseguraron que como federaciones no pueden pedirles a los jugadores que no lo hagan.
“La FIFA ha sido muy clara, impondrá sanciones deportivas si nuestros capitanes portan los brazaletes sobre el campo. Como federaciones nacionales , no podemos pedir a nuestros jugadores que se arriesguen a sanciones deportivas, incluidas tarjetas amarillas”, comunicado que escribieron siete federaciones.
Sin duda el tema de los derechos humanos y las garantías para todas las personas es una cuestión que no deja bien parado a ningún país del mundo. Es por esto que se ha planteado desde grupos muy conservadores de la nación árabe que se trata de islamofobia, puesto que los problemas que han señalado se replican en otras naciones sedes o participantes, por lo que resulta una lectura de doble moral.
Aunque esto no quita que las declaraciones que se han hecho por parte de autoridades locales con lo que violentan a la población LGBT+.
El académico de la Universidad de Qatar, Nayef bin Nahar, quien goza de importante fama en la región del mundo árabe ha respondido a las críticas dejando sin margen a responder a sus interlocutores occidentales.
En el caso de la escuadra alemana, Bin Nahar atizó contra los teutones: "Criticar a Qatar de esta forma u otra no es un problema, en realidad es un derecho básico. El problema aquí es la hipocresía. ¿Hiciste lo mismo cuando fuiste a Francia que robó la riqueza de África? ¿O Estados Unidos que hizo sufrir de hambre a un millón de iraquíes?", publicó por medio de su cuenta de Twitter.
Criticising Qatar this way or another is not an issue, it is actually a basic right. The issue here is hypocrisy. Did u do the same when u went to France who stole the wealth of Africa? Or America who made one million Iraqi suffer of hunger? pic.twitter.com/FNLKeGXC8j
Las respuestas siguieron en ese tono. Sin embargo, no es la primera vez que Bin Nahar defiende lo que él llama "los valores de Qatar", esto luego de que un periodista estadounidense Grant Wahl se le negara el acceso al estadio Ahmad Bin Ali para el encuentro entre Estados Unidos y Gales, todo porque el norteamericano vestía una playera con un arcoiris que alude a la bandera del orgullo LGBT+.
El qatarí atizó la denuncia del miembro de la prensa deportiva: "Como qatarí estoy orgulloso de lo que pasó. No sé cuándo se darán cuenta los occidentales de que sus valores no son universales. Hay otras culturas con valores diferentes que deben ser igualmente respetadas. No olvidemos que occidente no es el portavoz de la humanidad", lo que ha generado muchas opiniones respecto a la forma en que concebimos los valores y opiniones de culturas distintas.
As a Qatari I’m proud of what happened. I don’t know when will the westerners realize that their values aren’t universal. There are other cultures with different values that should be equally respected.
Let’s not forget that the West is not the spokesperson for humanity. https://t.co/Oa8zvmk6P7
En una de las respuestas un usuario alude "es solo una camiseta" y otra persona le responde "solo son personas con mantas en la cabeza".
"Qatar ya fue sede de la copa asiática de fútbol, los Juegos Olímpicos asiáticos, la copa árabe de fútbol y nunca tuvo problemas. Es solo que cuando occidente llegó a Qatar pensaron que sus valores deberían ser los valores del mundo entero, ahí es donde se equivocaron", señala otro usuario.
Sin duda la discusión está abierta, los derechos humanos no deben ser negociables, pero el tema de valores y respeto cultural está presente por lo que la autocrítica y el revisionismo histórico como páis debe ser parte de esta conversación.