La masturbación siempre ha ido acompañada de tabúes, condenas desde morales, sociales y hasta religiosas, sin embargo es una práctica común y saludable para un ser humano.
Esta se vuelve más compleja cuando se habla de masturbación femenina, porque a diferencia de los hombres, esta llega a tener interpretaciones erróneas de esta expresión de la sexualidad de las mujeres.
En las últimas décadas la sexualidad femenina se ha abierto más y se le han ido reduciendo las condenas que se le hacen a esta práctica. Es en conmemoración al Día de la Masturbación que la plataforma Gleeden, que ofrece alternativas de encuentros sexual extramaritales para mujeres, nos arroja algunos datos de las practicas de autoerotismo que tienen las mexicanas que utilizan esta aplicación.
La gran parte de las usuarias en México, un 82%, considera que la masturbación le ha dado herramientas para conocerse mejor sexualmente y a disfrutar más del sexo.
La masturbación resulta hasta terapéutico, porque cumple otras funciones que la satisfacen (47%) se masturba para satisfacerse cuando tienen un ánimo sexual, también para desestresarse (33%), para sentirse feliz y bien conmigo mismo (12 %) y para conocer mejor sus puntos de placer (8 %).
La mujeres que tienen esta práctica compartieron que alcanza más y mejores orgasmos al auto estimularse, mientras que para la mayoría de hombres contestó que es lo mismo que al tener sexo.
Para las mexicanas, el 59% de las encuestadas mencionó que la masturbación es algo muy natural, el 24% cree que cada vez se ve como algo normal y sólo para el 17% sigue siendo tabú.
Se vuelve parte de la rutina diaria y de sus hábitos cotidianos, el 41% contestó que el tiempo que le dedican es relativo y depende de su humor, un 36% le dedica apenas unos minutos y el 23% media hora o más.
El 50% varias veces a la semana, 27 %, diario y 21% algunas veces al mes.
Un 47% en la cama o en el sofá, el 37% en cualquier lugar donde sienta el deseo, y 16% en la ducha.
Los juguetes sexuales tienen recursos muy útiles para el placer sexual, más allá de emular una penetración, también estimula los órganos sexuales. Para el uso de juguetes el 41% contestó que no, pero le interesaría intentarlo, al 33% no le interesa, 20% sí los usan y sólo al 6% no le convencen.
Un hallazgo importante de esta práctica sexual fue que el 69% prefiere auto estimularse en soledad y el 31% en compañía de su pareja sexual. Cabe mencionar que, al momento de darse placer, las mujeres piensan más en algún conocido, un amigo o en su amante. Mientras los hombres piensan más en alguien famosa, en su pareja o en su amante. Pequeña pero importante diferencia.
En el placer mandan ellas mismas, si durante el sexo su pareja quiere ofrecerle placer manual, esto opinaron ellas. El 33% de las mujeres prefiere hacerlo ella misma y guiar su placer, otro 22% orienta a su pareja para obtener mayor placer. Por parte de los hombres, en su mayoría, deja que su pareja experimente y lo masturbe según su instinto.
En este sentido, un 44% considera que la masturbación no afecta a las relaciones sexuales con su pareja, el 35% lo ve como un recurso complementario a la vida sexual, el 11% cree que las mejora y sólo el 7% considera que las disminuye.
Finalmente, el 100% de los encuestados mencionó que no cree que masturbarse cuenta como engaño a su pareja/amante.
