El parque temático de Shanghái ha reabierto con el aforo limitado al 30% de su capacidad diaria fijado por el gobierno chino y con medidas de seguridad como el mantenimiento de la distancia física, el uso obligatorio de mascarillas y mostrar el color verde en una aplicación de su teléfono para demostrar que no están contaminados y poder enterar.
La reanudación de la actividad será progresiva. El parque tiene previsto acoger un máximo de 24,000 personas al día durante varias semanas en vez de las 80,000 que suele acoger normalmente. Además es obligatorio reservar antes por internet.
Dentro del parque, los anuncios a través de megáfonos recuerdan a los visitantes que hay que mantener la distancia en la fila de las atracciones.
En el suelo, las líneas amarillas marcan la distancia mínima que hay que respetar entre las personas.
El parque prometió aumentar la frecuencia de la desinfección y limitar, o incluso anular, las interacciones entre el público y los personajes como Mickey y Donald.