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La película iraní Un simple accidente se lleva la Palma de Oro en Cannes 2025

Otra de las grandes ganadoras de la noche es El agente secreto, del brasileño Kleber Mendonça Filho, quien se llevó el premio a mejor dirección y mejor actor.
sáb 24 mayo 2025 03:16 PM
El director Jafar Panahi, ganador del premio de la Palma de Oro por la película "Un simple accidente", posa durante una sesión de fotos después de la ceremonia de clausura del 78o Festival de Cine de Cannes en Cannes, Francia, el 24 de mayo de 2025. REUTERS/Stephane Mahe
Un simple accidente, rodada en clandestinidad, narra el encuentro fortuito de un hombre que cree reconocer a su torturador en las calles de Teherán.

El 78º Festival de Cannes otorgó este sábado la Palma de Oro al cineasta disidente iraní Jafar Panahi por Un simple accidente, en una gala cargada de política en la que la brasileña El agente secreto, de Kleber Mendonça Filho, se llevó el premio a la mejor dirección y al actor.

El Gran Premio, el segundo más importante después de la Palma de Oro, se concedió a "Sentimental Value", del aclamado director Joachim Trier.

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El cine español logró también un trofeo, ex aequo: el premio del jurado, que compartió Sirat, la road movie de Oliver Laxe, con la alemana Sound of Falling, de la joven realizadora Mascha Schilinski.

Tras una jornada de cierto nerviosismo por un apagón en la ciudad, debido a un sabotaje de la red eléctrica, la ceremonia se celebró con normalidad, con una sala entregada a la humildad y firmeza de Panahi, un director que ha sido acosado, torturado y encarcelado por el gobierno de su país.

Un simple accidente, rodada en clandestinidad, narra el encuentro fortuito de un hombre que cree reconocer a su torturador en las calles de Teherán.

La cinta sigue a Vahid, interpretado por Vahid Mobasseri, que secuestra a un hombre con una pierna postiza que se parece al que le torturó en la cárcel y arruinó su vida.

Vahid se propone verificar con otros supervivientes de la cárcel que se trata efectivamente de su torturador, y luego decidir qué hacer con él.

"Creo que este es el momento de pedir a todos los iraníes, en Irán o en el mundo: dejemos a un lado (...) todos los problemas, todas las diferencias, lo más importante en este momento es la libertad de nuestro país", declaró el cineasta, de 64 años, al recibir el premio de manos de la actriz Cate Blanchett.

"Nadie tiene el derecho a decirte lo que tienes o no tienes qué hacer", prosiguió.

Encarcelado en dos ocasiones, Panahi pudo acudir a Cannes por primera vez en 15 años para recibir el galardón, junto a todos sus actores y actrices.

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Preguntado por si temía volver a su país tras llevarse el máximo galardón por Un simple accidente, una película contra el poder de los ayatolás rodada clandestinamente, Panahi respondió: "En absoluto. Mañana nos vamos".

Para el director, el premio "no es algo para mí".

"Es algo para todos los cineastas iraníes que ahora no pueden trabajar, pero esperamos que todos los cineastas iraníes puedan hacerlo", dijo.

La agencia de noticias oficial iraní IRNA informó que Panahi había conseguido el máximo galardón de Cannes.

"El mayor festival de cine del mundo ha hecho historia para el cine iraní", reporta la agencia, que recuerda que la primera victoria de un iraní en el festival fue en 1997, con Abbas Kiarostami.

Otro triunfo brasileño

El agente secreto, un thriller político ambientado en 1977, obtuvo una vibrante recompensa doble, que recogió el propio Mendonça Filho.

El actor Wagner Moura, que interpreta a un profesor que se enfrentó a la corrupción en su ciudad de Recife, a donde vuelve, a pesar de todos los peligros, estuvo ausente.

Kleber Mendonça Filho forma parte a sus 56 años del reducido círculo de cineastas habituales del certamen, con un cine que bebe al mismo tiempo del realismo mágico y la militancia política.

El agente secreto es la tercera película con la que competía en Cannes, después de Bacurau en 2019 y Aquarius en 2016.

"Creo que Cannes es simplemente la catedral del cine en este planeta", declaró el director.

"Hoy es un día para disfrutar la felicidad de vivir en un país que tiene gigantes del porte" del cineasta y el actor brasileños, festejó el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, en su cuenta de X.

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Moura, de 48 años, es uno de los rostros más conocidos del cine brasileño a nivel internacional, gracias a películas como la policial Tropa de élite (2007) y en particular por la serie televisiva Narcos.

El cine brasileño logra así otro éxito importante tras el histórico Óscar a la mejor película extranjera que obtuvo Walter Salles este año con Aún estoy aquí.

Una road movie española en Marruecos

Otro rostro habitual en la Croisette es la del cineasta español Oliver Laxe, nacido en Francia, hijo de migrantes gallegos.

Es la cuarta vez que Laxe participa en Cannes, y siempre se llevó algún premio.

En esta ocasión gracias a una película mística pero a ritmo de música tecno, rodada con el actor español Sergi López y un grupo de "ravers" (fans de las fiestas de música electrónica) no profesionales.

Sirat cuenta cómo un padre busca a su hija desaparecida, en el majestuoso pero peligroso desierto marroquí.

El premio a la mejor actriz en este festival que dio amplio espacio a las protagonistas femeninas (10 de 22 películas en competición) fue a parar a Nadia Melliti, de 23 años, por su primer papel en el cine.

La petite dernière, de Hafsia Herzi, narra la historia de una joven musulmana que descubre su homosexualidad.

Y Cannes acentuó su rol de escaparate de temas sociales con el premio al guión a los hermanos belgas Dardenne por Jeunes mères, sobre un grupo de adolescentes madres solteras.

El homenaje al mundo del cine vino con el gran premio otorgado al noruego Joachim Trier y su conmovedora Sentimental Value, sobre un padre cineasta que busca el reencuentro con sus hijas. Y con la abstracta Resurrection, del chino Bi Gan, premio especial, una especie de homenaje a la libertad de soñar y al cine.

Con información de AFP y Reuters

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