Todas las mujeres pueden tener un orgasmo múltiple
Contrario a lo que la mayoría piensa, que una mujer sienta varios orgasmos en un solo encuentro sexual no es un don otorgado a unas pocas mortales.
Esta situación juega a favor del género femenino porque, a diferencia de los hombres, no atraviesan por la intensa fatiga que ellos experimentan tras la eyaculación. Sin embargo, el hecho de no conseguirlo no es sinónimo de frigidez ni de poca capacidad en él para provocarlo. Apenas el 25% de las mujeres, en promedio, alcanzan el clímax en un encuentro sexual y las condiciones que influyen para obtenerlo son muchas: si se está con una pareja fija o con alguien a quien acaba de conocer, del nivel de cansancio físico, de qué tan excitada esté en el momento... Lo más importante es tener presente que es posible, tanto que la ciencia ha registrado hasta 226 orgasmos experimentados en una sola sesión de actividad sexual.
Un espasmo corto puede provocar entre tres y cinco contracciones, mientras uno largo, hasta diez. Una vez que ocurre, viene un periodo de relajación y, si ambos lo quieren, el periodo refractario, que es como se conoce al tiempo transcurrido entre el primer orgasmo y comenzar de nuevo con la excitación.
Según algunos investigadores, el secreto está en no sobreestimular el clítoris, lo que resulta difícil por la cantidad de terminaciones nerviosas que tiene. Por ello, el ForePlay que puede ofrecer un hombre a su pareja, es decir, todo el juego preliminar al coito, siempre representa un acierto, pues de esta manera ellas pueden conseguir el primero mediante la estimulación del clítoris y el segundo a través de la penetración. Los demás dependerán de jugar con las zonas que resultan más erógenas para cada mujer.