Así fue creada la edición especial de Johnnie Walker Blue Label

Se dice que, hoy en día, un guerrero es aquel que está dispuesto a librar batallas cotidianas para cambiar su entorno y alcanzar su sueño. Se dice que alguien con espíritu “guerrero” es aquel que progresa continuamente para lograr un cambio, aquel que lucha para defender sus ideales y llegar a donde otros no han llegado; aquel que persiste, inventa, crea.

Con la intención de rendir un homenaje a todos esos espíritus apasionados e inquebrantables de los mexicanos que levantan su arte como un grito de batalla para inspirar el progreso, como coraje en la adversidad, como una expresión de alegría y optimismo, Johnnie Walker Blue Label, realizó una edición limitada y exclusiva para México: Guerreros II, realizada por el artista contemporáneo Gonzalo Lebrija.

Y es que lo especial de este whisky es que su Master Blender ha hecho el balance perfecto para combinar la juventud con la experiencia, mezclando whiskys de hasta 30 años de añejamiento con whiskys más jóvenes, que, combinados, otorgan a la vez fuerza y carácter, con elegancia y sofisticación.

Inspirados en esta unión de la experiencia con la juventud y en el acercamiento que Johnnie Walker ha tenido con las artes desde sus inicios; en Life and Style hemos decidido hablar sobre 10 personajes de México que son considerados “Guerreros”, en cinco disciplinas artísticas: arquitectura, música, arte, literatura y, ahora también, la gastronomía. “Guerreros” a los que Johnnie Walker Blue Label quiere rendir homenaje con su nueva edición.

En cada una de estas disciplinas, hablaremos de un guerrero que represente la experiencia y otro que represente la juventud y la proyección, para también crear ese equilibrio prefecto entre ambos mundos.

Arte: Francisco Toledo y Gonzalo Lebrija

Si algún artista en México ha librado batallas para la conservación del patrimonio mexicano es Francisco Toledo: lo mismo defendiendo zonas arqueológicas, el medio ambiente o edificios de valor histórico. Toledo es uno de nuestros artistas vivos más importantes y también uno de nuestros activistas, ambientalistas, difusores culturales, luchadores sociales y filántropos más importantes. Este guerrero que ha llevado su pintura, arte, animales y seres fantásticos a nivel mundial, producto de su inspiración y el “imaginario colorido” de su natal Oaxaca, también sigue impulsando a nuevas generaciones de pintores con proyectos tan importantes como el Centro de las Artes “CaSa” en la comunidad de San Agustin Etla siendo el primer centro de arte ecológico de Latinoamérica, en donde jóvenes sin recursos producen y estudian fotografía, gráfica digital, diseño textil, así como preservación del patrimonio y arte enfocados al medio ambiente.

Gonzalo Lebrija es uno de los artistas mexicanos jóvenes con más proyección internacional. Ha expuesto en las galerías y museos más importantes de Madrid, Los Ángeles, Ciudad de México, París, Lyon, Moscú, Guadalajara o Berlín. Es un artista multidisciplinario que trabaja en video, fotografía, instalación, así como también se vale de la escultura o el dibujo para expresar los temas que obsesionan su obra: el tiempo, los símbolos de poder y la vulnerabilidad. Él diseñó la nueva botella de la serie “Guerreros II” de Johnnie Walker Blue Label. Pero donde este guerrero libra su principal batalla cotidiana es en la iniciativa que creó junto con el artista José Davila: el OPA (Oficina para Proyectos de Arte) en Guadalajara, un centro de arte que alberga proyectos de arte contemporáneo de artistas con trayectoria internacional, a pesar de la poca demanda sobre el tema en su ciudad natal, y que ha acogido a artistas de la talla de Nic Hess, Yutaka Sone, Mario Garcia Torres o Patrick Charpenel. En esta lucha, Lebrija ha contribuido a crear nuevos públicos para el arte e incrementar el interés mostrado hacia el arte contemporáneo, así como tener un espacio en Guadalajara donde el público pueda conocer la obra de los grandes artistas contemporáneos actuales.

Música: Alondra de la Parra y Esperanza de Velazco

Alondra de la Parra. Aunque sigue siendo muy joven, su experiencia y formación es vastísima. Alondra de la Parra es una verdadera Guerrera: no sólo se ha abierto camino en un medio que había sido dominado por hombres, sino que también ha llevado su arte a lugares en donde ningún mexicano ha llegado. Ha estado al frente de las mejores orquestas del mundo, como la Orquesta de Paris, la Orquesta Filarmónica de Londres, la Orquesta Sinfónica de la Radio de Berlín y, la Orquesta Sinfónica de Queensland, Australia que es su actual reto, pues es la l Directora Artística con este cargo que nunca antes había estado en manos (las de Alondra son alas) de un extranjero. Francia, Japón, China, Reino Unido, Italia, México, son solo algunos de los países que han disfrutado el talento de esta mexicana.

Esperanza de Velazco, es compositora, directora de orquesta y arreglista. Tiene 32 años, y lo mismo ha dirigido a la Orquesta Sinfónica Juvenil Carlos Chávez por tres años, que dirigido Ópera “Viva la Mamma” de G. Donizetti en Bellas Artes, orquestas en todo el país o ha sido finalista en concurso de Dirección de Alondra de la Parra y Kenneth Kiesler. Ha hecho arreglos para cantantes de la talla de Fernando de la Mora, Lila Downs o Javier Camarena así como para cine, publicidad y teatro. La versatilidad es lo que caracteriza la obra y el andar de esta novel músico que la revista Newsweek en Español, calificó como “uno de los mexicanos más destacados del 2014 en el rubro de cultura”. Pero sin duda lo que la convierte en una verdadera “guerrera” es el proyecto que lleva junto con su hermana gemela Josefa: la empresa Fonobox la cual cuenta con un estudio de grabación con la capacidad de grabar hasta 50 músicos simultáneamente. Uno de los objetivos principales de Fonobox es mantener el trabajo para artistas mexicanos, ya que gran parte de la música grabada que se genera en México es producida fuera del país.

Gastronomía: Alex Ruiz y Eduardo Morali

A Alejandro Ruiz le debemos, en gran medida, el boom gastronómico que disfrutamos hoy en día. Él es uno de los sus precursores desde su natal Oaxaca y desde su centro de batalla, el restaurante Casa Oaxaca. Este “guerrero”, entendió perfectamente que si nuestra gastronomía iba a adquirir notoriedad a nivel internacional era regresando a lo orígenes, no renegando de lo popular (una apuesta que le costó mucho trabajo colocar, pero que hoy le da frutos de talla mundial); entendiendo las virtudes y complejidad que tiene la realización de un mole, de rescatar el mezcal o los chapulines; de valorar, en el contexto contemporáneo la sutileza de un mole “amarillito” si se combina con una carne como el venado. Desde hace más de 20 años, Alex deleita con su cocina honesta, ya sea desde “Casa Oaxaca” o “Guzina” en la CDMX, pero sobre todo, sigue ayudando a muchas nuevas generaciones de chefs que se acercan a él en busca de un consejo o una nueva sazón.

Eduardo Morali por su lado representa la fuerza de la juventud de los nuevos chefs, que a diferencia de muchos de sus congéneres que apuestan por la presentación, la cocina molecular o los experimentos culinarios; Morali (finalista en el primer Top Chef México) va a contracorriente y apuesta a los procesos y a los ingredientes. Por ello define su cocina como “clásica francesa en un contexto contemporáneo”: busca que sus salsas sean perfectas, que sus procesos de cocción sean precisos y que sus ingredientes sean de la mejor calidad para siempre ofrecer lo mejor a su fiel clientela del Eloise, restaurante que lleva en conjunto con su socio, el chef Abel Hernández. Un “guerrero” desde los fogones que asombra con su cocina chic francesa.

Literatura: Ignacio Padilla y Aura Xilonen

Ignacio Padilla escribió novela, cuento, ensayo, literatura para niños, crónica, teatro. Desafortunadamente murió en un accidente hace menos de un mes, por ello en Life and Style quisimos rendirle un pequeño homenaje incluyéndolo en esta lista de “guerreros del México contemporáneo” como uno de los más importantes escritores de nuestro país. Fundador de la llamada “Generación del Crack” junto con Jorge Volpi, Pedro Ángel Paolu, Eloy Urroz y Ricardo Chavez Castañeda, en el momento de su muerte era el miembro más joven de la Academia Mexicana de la Lengua. Era un especialista en Miguel de Cervantes Saavedra y en el Quijote.

Su muerte cayó como loza inmensa en el mundo literario y, como en mucho tiempo no se veía, creó consenso sobre su enorme pérdida. No había comentarios negativos sobre él. Como dice el escritor Alberto Chimal: “Nacho Padilla no proyectaba arrogancia ni cólera: proyectaba inteligencia, humor, empatía. Era un gran conversador, que sabía reírse de todo y desarmar a la gente solemne con tal gracia que ellos también acababan riendo”. Afortunadamente nos queda mucho de su obra (incluso una inédita que aparecerá pronto: Inéditos y extraviados, libro que reúne desde sus primeros relatos hasta algunos de los más recientes, que fueron publicados en diversas revistas). En una entrevista, Ignacio Padilla señaló enfático: “Quiero que mis cuentos se lean en un futuro, cuando no esté, como mi biografía. A todos los encuadro en lo que llamo micropedia; ése será algún día el nombre de mi obra cuentista. Que se lea incluso llegado el momento de mi muerte”. Así será “Nacho”: Tu obra y arte literario perdurará en nosotros, tus lectores: los actuales y los futuros. D.E.P.

Aura Xilonen escribió a los 18 años su primera novela “Campeón Gabacho”. A los 19 ganó con esta novela el Premio “Mauricio Achar/ Random House” de literatura. A los 20 (su edad actual) sigue estudiando cine en la BUAP y tiene su propia casa de producción audiovisual llamada, (de forma homónima) “Aura”; y se ha convertido en una de las grandes promesas del nuestro panorama literario actual. Aura es una “guerrera” que no teme romper paradigmas y atreverse a escrituras trasgresoras, osadas y sorprendentes. En su novela, trasgrede el español y crea un nuevo “ingleñol” para contar la historia de Liborio, otro “guerrero”, cuyas peripecias son sobrevivir en ese Estados Unidos feroz contra los migrantes. Irónicamente lo que rescata a Liborio, es el amor y la literatura: la lectura permanente. Aunque en el amor y en la literatura encuentra la “inutilidad de las palabras”, también crea un lenguaje nuevo, innovador: fulminante. No hay que perder de vista a esta nobel escritora, que sin duda marcará con sus letras los caminos que ha de seguir nuestra literatura en un futuro.

Arquitectura: Enrique Norten y Juan Carlos Baumgartner

La visión arquitectónica de Enrique Norten lo tiene posicionado como el arquitecto mexicano con mayor proyección internacional hoy en día. Más de 30 años de trayectoria lo respaldan. Sus edificios y construcciones se han vuelto icónicas, no sólo en México, sino también en Nueva York, Washington o Miami. Entre sus obras destacan el Hotel Americano, el edificio residencial que se ha vuelto uno de los must de la Gran Manzana: el Mercedes House, o la ampliación de la Biblioteca Pública de Nueva York, todo ello en una de las ciudades más disputadas y difíciles: Nueva York. Pero también del exclusivo edificio residencial One Ocean de Miami o la Biblioteca West End de Washington DC. En México, podemos apreciar su estilo en la remodelación del espectacular Museo Amparo o el plan maestro para el complejo cultural urbano del Paseo Bravo que dará una visión renovada del Centro Histórico de Puebla. Otras obras como la Rutgers Business School en Nueva Jersey, sin duda serán ícono de la arquitectura en un futuro. Norten, como buen “guerrero”, incursiona en los diferentes ámbitos de su disciplina y sus proyectos incluyen el diseño de muebles, casas unifamiliares, edificios residenciales, culturales e institucionales, así como paisajismo y planes urbanos. Merecedor de premios en todo el mundo, Norten continúa su batalla por perdurar en el tiempo con obras que cambian la forma de vivir y habitar los espacios.

Con poco más de 30 años, Juan Carlos Baumgartner co-fundó en Chicago su propia firma de arquitectura: SPACE y lo hizo basado en su pasión: pensar el espacio como una forma de hacer la diferencia. Apasionado también del uso de la tecnología para repensar los materiales de sus construcciones, Baumgartner es un joven arquitecto que además busca siempre soluciones sustentables que no sólo respeten el medio ambiente, sino que también ayuden a mejorar sustancialmente el entorno donde se construyen. Sus obras abarcan desde arquitectura corporativa, interior y exterior, hotelería, arquitectura comercial hasta diseño de restaurantes (como el espectacular Tori-Tori de Polanco) puntos de venta, centros comerciales y una vanguardista arquitectura residencial. Un guerrero que busca repensar el espacio para hacerlo más humano con base en un diseño pensado desde dentro hacia afuera. Desde los sentimientos interiores más puros hasta su expresión final en el espacio físico.