"Ha sido realmente duro. Ya en Rio fue duro (en semifinales, ganada en febrero por Alcaraz por 6-7, 7-5 y 6-0), así que estoy feliz de avanzar y de haber recibido tanta energía del público", comentó el español en la entrevista a pie de pista.
"La llave es siempre creer y mantenerse concentrado. Sabía que tendría mis oportunidades", añadió el español, que no esconde su ambición por sumar un segundo Grand Slam en Londres.
En octavos, Alcaraz se medirá al vencedor del duelo entre el alemán Alexander Zverev (N.21) y el italiano Matteo Berrettini (N.38), finalista en 2021.
Iguala su mejor resultado en Londres
El año pasado, en su segunda participación en el All England Club, Alcaraz fue derrotado en octavos por el italiano Jannik Sinner, pero esta temporada el español llega con otro estatus, como número 1 de la ATP, después de haber ganado su primer Grand Slam (el US Open) y tras conquistar recientemente en Queen's su primer torneo en hierba.
De hecho, Alcaraz podría convertirse en el octavo hombre capaz de ganar en Queen’s y Wimbledon en un mismo año, algo que solo lograron antes Boris Becker, Jimmy Connors, Lleyton Hewitt, John McEnroe, Andy Murray, Rafael Nadal y Pete Sampras.
No obstante, tras dos primeras rondas que superó sin ceder un set, Jarry opuso una gran resistencia. En el primer set logró el 'break' para ponerse 5-3 y ganar el parcial con su servicio... después de que el chileno desaprovechase una bola para devolverle el quiebre.
En la segunda manga, Jarry se colocó con 3-0, pero Alcaraz llevó el desenlace al 'tie-break', donde el chileno igualó el partido.
El tercer set se volvió rápidamente favorable al español, pero en el cuarto, Jarry volvió a ofrecer resistencia y colocarse de nuevo con 3-0 y tener dos bolas para colocarse con ventaja de dos 'breaks'. Sin embargo, el español reaccionó, se colocó 4-4 y logró el 'break' decisivo para colocarse 6-5 y servicio para ganar.
El otro español que jugó este sábado, Alejandro Davidovich (N.34) quedó muy cerca de dar la sorpresa ante el danés Holger Rune (N.6), que acabó imponiéndose en el 'super tie-break' por 6-3, 4-6, 3-6, 6-4 y 7-6 (10/8) en cuatro horas de batalla y de levantar dos 'match-balls' en el quinto set.