¿Suerte, buen trabajo del DT Andrés Lillini? Mucho se habla de las condiciones que tienen a Pumas en esta etapa del torneo, pero lo cierto es que con seis victorias en los más recientes nueve partidos, los felinos han dejado claro que el torneo mexicano premia a quienes saben cerrar el certamen, no a quienes muestran mayor constancia en el desarrollo del semestre.
Pumas, un candidato al campeonato por cómo está enfrentando esta etapa, finalizó como décimo primer lugar de la tabla general, a 14 puntos del líder, América -a quien ya eliminó en cuartos de final- y ocho unidades del sublíder, Atlas. En cualquier lugar del mundo, el equipo que finalice en la posición 11 del torneo solo podría pensar en cómo reestructurarse de cara al siguiente torneo, mientras que en México, puede pelear la coronación.
Un antecedente, varias coincidencias
El partido Atlas-Pumas no es inédito en semifinales, y es que durante la Liguilla del Apertura 2004 también disputaron un boleto a la serie por el título. En aquel entonces, con Hugo Sánchez como director técnico, Universidad Nacional eliminó a los rojinegros con global de 6-4, para después conseguir el bicampeonato ante Rayados.
La afición rojinegra recuerda aquel año con mucho cariño, gracias a la figura de Robert de Pinho, un delantero brasileño que se quedó cerca del campeonato de goleo y emocionó a propios y extraños con su capacidad goleadora.
Otra coincidencia con el 2004 es que, tal como ocurrirá en el torneo actual, el juego de ida se disputó en Ciudad Universitaria, y el definitivo será sobre el césped del Estadio Jalisco.
Así mismo, en ese año Pumas accedió a la Liguilla como octavo lugar, vía repechaje, situación que se repitió esta vez, ya que Pumas llegó a la fase final después de ganar la repesca ante Toluca.
Así que, para Atlas es una oportunidad de revancha y de acercarse al título que se le ha negado por 70 largos años y, para los universitarios, una chance de repetir la eliminación reciente a los jaliscienses y conseguir una de las hazañas menos esperadas, ya que durante el torneo causaron más interrogantes que certezas.
O Pumas o Atlas estarán en la final, y para alguno llegará la oportunidad de revertir la historia -lejana o cercana- en bandeja de plata.