La figura gigante de un felino dibujada en la colina de un cerro de Perú fue descubierta por casualidad y estaba por desaparecer de la Pampa de Nasca, que tiene cientos de jeroglíficos de animales que datan de hace más de 2,000 años, según afirmó un arqueólogo local.
El jeroglífico de 37 metros de largo esta compuesto por un largo cuerpo y una cabeza con orejas puntiagudas que se asemejan a un felino, según se puede apreciar en las imágenes captadas por un dron que sobrevoló la zona a unos 450 kilómetros al sur de Lima.