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¿Cómo llegó el 'penacho de Moctezuma' a Viena y por qué su regreso es un riesgo?

Al estar formado principalmente por material orgánico, cualquier vibración lo destruiría, según el consenso de un comité de curadores, restauradores y científicos tanto de México como de Austria.
mié 14 octubre 2020 02:37 PM
penacho moctezuma
Reclamado desde 1991, el penacho es la joya que las autoridades mexicanas anhelan repatriar de cara al 2021.

El Penacho de Moctezuma, un abanico de plumas de quetzal y oro que, en un estado de fragilidad, se conserva en el Museo Antropológico de Viena y que simboliza el poder máximo del México Antiguo, es ahora objeto de polémica por la negativa de Austria a prestarlo para las conmemoraciones de 2021.

Reclamado desde 1991, el penacho es la joya que las autoridades mexicanas anhelan repatriar ahora de cara al 2021, cuando confluirán las celebraciones de los 700 años de la fundación de Tenochtitlán, los 500 años de la Conquista y los 200 años de vida independiente.

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Sin embargo, el Museo Antropológico de Viena sostiene que la joya no podría ser llevada a México "al menos en los próximos diez años", asegura Gerard van Bussel, curador de las colecciones de América del Norte y Central de esa institución pública austríaca.

"El penacho es demasiado frágil", sentenció van Bussel, ya que está formado principalmente por material orgánico, y cualquier vibración "en el aire o la carretera lo destruiría".

"Me gustaría conocer a la persona dispuesta a asumir esa responsabilidad", dijo el curador.

De 2010 a 2012 se formó un comité binacional compuesto por curadores, restauradores y científicos tanto de México como de Austria para restaurar el penacho y que pudiera exponerse de nuevo.

"Al final, tanto los curadores austríacos como los mexicanos decidieron que el penacho era demasiado frágil para viajar", declaró van Bussel, que explicó que haría falta "un avión de 300 metros para compensar las vibraciones".

Incluso dentro de la misma pinacoteca, no se atreven a bajarlo de la primera planta, donde está expuesto, por miedo a que pueda sufrir cualquier desperfecto. Por este mismo motivo, la pieza no será parte de la nueva exposición Aztecas, que el Welt Museum inaugurará este jueves.

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¿Cómo llegó a Viena?

La mayor documentación sobre el destino que tuvo el penacho desde que fue enviado al emperador hasta su aterrizaje en el Museo de Viena la hizo la arqueóloga mexicana Carmen Gloria Cook.

Primero, dijo la antropóloga, la colección se mantuvo en exhibición en Bruselas; en 1563 le perteneció a Fernando, conde de Tirol, quien la tenía en el palacio de Ambras, en Innsbruck, Austria.

A su muerte, la colección fue movida en varias ocasiones debido a los conflictos armados de la época hasta que terminó en Viena en 1817, donde se quedó en unas bodegas hasta 1878.

Según las versiones que se consulten, Moctezuma le regaló el penacho a Cortés, quien lo obsequió al rey Carlos I de España y V de Alemania, o Cortés lo sustrajo junto con el bastón de mando, el escudo de armas y el banderín del gobernante.

Si fue usado o no por Moctezuma, el penacho es considerado como un símbolo del poder máximo del mundo prehispánico y del supuesto saqueo de la riqueza del México Antiguo.

En lengua náhuatl, se le llamó 'copilli quetzalli' y era un abanico ceremonial con 68 piezas de oro de 24 quilates, 400 plumas de quetzal y un escudo de guerra que representa el poder y la sabiduría en la cosmogonía náhuatl.

Con información de EFE

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