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El Super Bowl XXVI hizo de Michael Jordan una estrella de cine con 'Space Jam'

Un comercial transmitido en 1992, durante el Super Bowl XXVI, el cual contó con la actuación de Michael Jackson en el medio tiempo, fue el que catapultó a Jordan para ser una estrella de cine.
vie 15 mayo 2020 06:00 AM
Space Jam
Space Jam fue aprobada y estuvo a cargo de Joe Pytka, quien también dirigió el primer comercial protagonizado por Bugs y Michael.

En la década de 1990, Michael Jordan era la súper estrella del basquetbol por excelencia y, por ende, la imagen que toda marca quería en sus comerciales. El cereal Wheaties, Gatorade, McDonald's, la marca de ropa interior Hanes y, desde luego, Nike, ostentaban el rostro del líder de los Chicago Bulls.

Pero quizá Nike ha sido el patrocinador más importante, no por nada, la silueta del deportista sigue apareciendo hasta nuestros días en diferentes modelos de los codiciados y siempre a la moda Air Jordan. Precisamente, esta marca deportiva, la única que se decidió a patentar en su momento los tenis de Michael, fue la que lo catapultó como una estrella de cine de manera casi accidental gracias a sus comerciales.

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El Super Bowl es, año con año, uno de los eventos más destacados a nivel mundial y casi tan importante como el juego en sí, figuran tanto el espectáculo de medio tiempo, como los esperados anuncios, cuyas marcas, pagan millones de dólares por unos segundos de exposición. Cada centavo vale, pues los ojos del mundo están fijos en este espectáculo, cosa que Nike aprovechó en 1992, de la mano de Michael Jordan y Bugs Bunny.

Un comercial de un minuto exacto de duración fue transmitido durante el Super Bowl XXVI, también legendario por haber sido amenizado durante el half time por nada más y nada menos que otro ídolo de los 90: Michael Jackson. En el terreno de juego, los Buffalo Bills y los Washington Redskins, se enfrentaban por ganar el trofeo Vince Lombardi, siendo estos últimos en llevárselo por un marcador de 37 a 24.

En el anuncio, podemos ver a un indefenso Bugs Bunny interrumpido en su descanso por un grupo de novatos basquetbolistas que se encuentran jugando sobre la duela que además funge como guarida del personaje de los Looney Tunes. El grupo de al menos cuatro jóvenes bullea al conejo e, incluso, lo encestan. Bugs decide retar al grupo a un duelo de basquetbol, se pone sus 'Hare Jordan' y enseguida aparece Michael con sus Air Jordan para vencer y hasta humillar al grupo de bravucones con bromas características de la caricatura protagonizada por Bugs Bunny.

Tal fue el éxito de este comercial, que al año siguiente, en 1993, hubo un segundo anuncio y en 1995, comenzaron las pláticas con Michael Jordan para concebir Space Jam.

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David Falk, agente de Michael Jordan, fue quien insistió en que estos comerciales fueran ampliados o incluso, se adaptaran a una película, pues Warner Bros. estaba buscando la manera de revivir la franquicia de los Looney Tunes y consideró que Michael sería el conducto ideal, de acuerdo con el medio Chicago Tribune.

El proyecto fue aprobado y estuvo a cargo de Joe Pytka, quien también dirigió el primer comercial protagonizado por Bugs y Michael.

Quizá sorprendentemente, la película fue un rotundo éxito en la taquilla de 1996, pues combinó el live action, la animación y sobre todo, un atleta profesional que roba cámara por completo al tratarse de su primera película, la cual costó un estimado de 90 millones de dólares (mdd), recaudó 90.4 mdd tan solo en Estados Unidos y a nivel mundial se disparó a los 230 mdd.

Por si fuera poco, el soundtrack fue seis veces platino (recordemos que durante la década, cada platino en Estados Unidos se entregaba por millón de disco vendidos) y el sencillo I Believe I Can Fly, de R. Kelly, ganó un Grammy. A esto se le suma, según Chicago Tribune, más de 1,200 mdd en ganancias provenientes de 78 productos comercializados a nivel mundial con los personajes de la película, los cuales iban desde comestibles, accesorios, juguetes y hasta cepillos de dientes.

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