Se trata de la primera vez que los organizadores de los Oscar toman esta medida, que dejará de aplicarse una vez que las autoridades federales, estatales y locales de Estados Unidos permitan la reapertura de las salas cinematográficas.
"La Academia cree firmemente que no hay mejor manera de experimentar la magia de las películas que verlas en un cine. Nuestro compromiso con eso no ha cambiado y es inquebrantable. No obstante, la histórica y trágica pandemia por Covid-19 hace necesario aplicar esta excepción temporal a nuestras reglas", dijo el presidente de la institución, David Rubin, en el comunicado.
El cambio del reglamento añade dos puntos acordados en una reunión de la Junta de Gobernadores de la Academia, celebrada esta mañana en Los Ángeles.
El streaming al rescate
Por un lado, la cinta deberá estar disponible en el Academy Screening Room, el servicio de emisión digital privado para todos los miembros de la Academia durante 60 días desde su estreno en internet.
Por el otro, tendrá que cumplir con todos los demás criterios de elegibilidad.
Hasta ahora, la normativa exigía que las cintas aspirantes a los Oscar se proyectaran en cines del condado de Los Ángeles y durante al menos siete días consecutivos, algo que, por ejemplo, Netflix tuvo que hacer para que Roma y Marriage Story entrasen en concurso.