El mexicano que debes seguir en Broadway
Tras crecer en Sayulita, Rodney tuvo un gran sueño: ser uno de los mejores tenores del mundo, obtener los aplausos de Broadway , protagonizar los clásicos y ser uno de los actores más respetados.
Hoy, la meta está cada vez más cerca. No sólo protagoniza El fantasma de la ópera, sino que, además, fue reconocido como la gran revelación del teatro por los premios National Youth Theatre. Aquí, en entrevista, el mexicano que con su voz está conquistando el mundo.
Rodney hoy ya no eres un prospecto mexicano en Broadway, sino una realidad... a la distancia, ¿qué significa en tu carrera El fantasma de la ópera?
—Nunca imaginé el nivel artístico y la dedicación que implicaba tener un lugar en esta puesta. En cada función me asombro de la precisión de los involucrados. Todos aquí formamos parte de una producción histórica que ha sido un legado de generación en generación y, sin duda, esto me llevó a entender la responsabilidad de haber alcanzado mis sueños.
Cuando llegas a una audición, ¿qué es lo primero que buscas transmitir?
—En ocasiones, no tienes la menor idea de qué vas a mostrarles en el escenario y, mucho menos, de qué te van a pedir. Es en ese espacio en el que, ¡de verdad, te juegas el papel! Creo que la única manera de llenarlo es la confianza: si eres capaz de demostrar lo que puedes dar, si te lo quedas o no, ya no tendrá que ver contigo ni con tu talento.
Cuando volteas hacia atrás para evaluarte, ¿qué papel desempeña México en tu vida y en tu carrera?
—Sayulita está en mis sueños. Está en mis fotografías de infancia y en mis amistades. En México están mis raíces; pude aprender mucho de canto, actuación y baile en otros países, pero mis bases emocionales y valores se formaron en ese pequeño pueblito del sur en el que un taco al pastor y poder surfear lo eran todo.
¿Y París? ¿Qué significa para ti?
—Ahí me di cuenta de que lo que hacía por diversión también podía ser un oficio para la vida. Ahí vi las primeras obras que me marcaron. Entendí sobre nombres de actores que habían hecho historia, me empapé de todo lo que quería ser.
—Fuiste reconocido como una revelación del teatro juvenil, ¿sientes presión ahora que ya no eres promesa?
—Siento que estoy en el lugar correcto. He dado pasos lentos pero seguros... y hoy no tengo que demostrarle a nadie qué puedo llegar a ser.