Si tienes problemas de insomnio, levantarte temprano puede ayudar. Según diversos estudios, las personas que se levantan más temprano tienen a quedarse dormidas más rápido porque, obvio, sus cuerpos se cansan más tempran y tienen sueño de mejor calidad, que los acerca mucho a cumplir los ciclos de sueño completos. Esto, a su vez, hace que despierten con más energía que las personas nocturnas.
Con todo esto, levantarte temprano hace que tengas mejores hábitos, lo que te ayuda a descansar más, estresarte menos y ser más puntual, ordenado.y saludable. En pocas palabras: te conviertes en una persona más feliz.
Pero, ¿cómo levantarse temprano si es una tarea tan tediosa (al inicio)? Estos tips son un buen punto de partida.
Tips para levantarse temprano
Duérmete más temprano. Quizás sea obvio decirlo, pero si te vas a levantar más temprano, lo lógico es que te tengas que dormir más temprano. Así tendrás más energía para y será más fácil desarrollar el hábito de manera sostenible.
No dejes tu celular en tu recámara. De hecho, no tengas ningún tipo de pantalla en tu cuarto, al menos un par de horas antes de dormir. Lo ideal es que pongas el celular en la habitación en la que quieres empezar el día. Así, cuando tu alarma suene, digamos, a las 6 de la mañana, tendrás que ir ahí para apagarla, y estarás en el lugar necesario para, con un poco de fuerza de voluntad, comenzar tu día. Ojo: esto no significa que tengas que empezar a trabajar directo; quizás tu día puede empezar con una taza de té en tu cocina o una rutina de skincare en tu baño.
Entrénate para salir de la cama. La psicóloga Mel Robbins explica en su libro The 5 Second Rule que cuando estamos posponiendo algo que tenemos que hacer, es porque tenemos dudas. Contar hasta cinco hace que el cerebro se concentre en otras cosa, y para cuando llegas al número uno, necesita una tarea más. Haz que esa tarea sea salir de tu cama.
Lávate los dientes y la cara. Estos actos básicos de cuidado personal te ayudan a sentirte más despierto y te hacen sentir fresco para comenzar el día.
Recurre a tu bebida de preferencia. Ya estás haciendo el esfuerzo de levantarte temprano, así que no te tortures intentando, además, despertar sin café o tu fuente preferida de cafeína. Muchos doctores recomiendan no iniciar el día con café, pero si tú lo necesitas para funcionar, consúmelo hasta que tengas desarrollado el hábito de levantarte temprano. Ojo: si no lo consumes habitualmente, esto tampoco es pretexto para empezar a hacerlo.
Encuentra una razón valiosa. Si no tienes una razón para hacerlo, es posible que levantarte temprano no sea un hábito sostenible. Piensa en que despertar antes de lo normal implica que tendrás una o dos horas extra al día. ¿Qué te gustaría hacer con este tiempo? Velo como tu oportunidad para leer un libro, hacer ejercicio, escribir en tu diario… las posibilidades son tan amplias como tus pasatiempos.