Gracias a su agradable clima y a su enorme diversidad geográfica, España ha dado origen a una gran variedad de vinos capaces de conquistar los paladares más exigentes del mundo, entre los que destaca la Denominación de Origen Rueda, una de las escasas zonas europeas especializadas en la elaboración de vino blanco. Allí, se protege y desarrolla el Verdejo, su variedad autóctona.
Rueda: un viaje al corazón del vino blanco en Castilla y León
Aunque los orígenes del vino en la región se remontan a la Edad Media, el certificado de Denominación de Origen no fue otorgado por el Gobierno hasta el año 1980, convirtiéndose así en la primera de la comunidad autónoma de Castilla y León gracias a sus 74 municipios: 53 ubicados al sur de Valladolid, 17 al oeste de Segovia y 4 al norte de Ávila. Pasemos, pues, a la parte de la exploración.
Durante cuatro días de septiembre de 2024 nos adentramos en el mundo del vino de esta rica y próspera Denominación de Origen para conocer de primera mano todo lo que ofrece, con un variado programa de actividades que incluyó visitas a bodegas, viñedos de la región y la oportunidad de presenciar la vendimia nocturna, siempre bajo la atención y con el entusiasmo de expertos enólogos, bodegueros y miembros del Consejo Regulador.
Día 1: Introducción y catas
Todo comienza en Rueda (Valladolid) con una visita al Consejo Regulador. Una cata general y un momento dedicado a conocer más sobre el proceso de inspección y todo lo que conlleva al resultado final de un gran vino es lo que se necesita para empaparse de la ciencia de la enología. En la sede, el equipo vela por el cumplimiento del reglamento, supervisa el cultivo, la vendimia, la elaboración, la crianza y el contraetiquetado.
La siguiente parada llega en Bodega Finca Montepedroso, cuyo objetivo –gracias a sus 25 hectáreas de viñedo– no es otro que ofrecer vinos intensos, frescos, elegantes y auténticos elaborados con la variedad Verdejo. Este primer día cierra con broche de oro en Valladolid con una ruta de tapas nocturna (algunas de ellas premiadas), que por supuesto maridan con una amplia variedad de vinos de Rueda.
Día 2: Bodegas y gastronomía local
El segundo día comienza con una agenda apretada, pero estamos listos para seguir empapándonos del conocimiento vitivinícola de Castilla y León. Emprendemos el viaje en La Seca con una visita a Bodegas José Pariente, fundada en 1998. Palacio de Bornos y Bodegas Pandora, en Rueda, así como Bodega Cuatro Rayas, en La Seca, fueron las respectivas paradas a lo largo de una jornada en la que tuvimos la oportunidad de recorrer sus instalaciones antes de catar sus variedades.
¿Nuestros favoritos? Sauvignon Blanc 2023 de Palacio de Bornos, por sus aromas intensos de fruta tropical, y Sauvignon Blanc 2021 de Pandora, criado en barrica durante cuatro meses. Y otro gran cierre: cena en el acogedor Restaurante Gabi García, en Valladolid, donde nos deleitamos con su cocina tradicional de mercado elaborada con los mejores productos locales.
Día 3: Rica historia española y vendimia nocturna
En el tercer día en Rueda , las visitas a las bodegas no se hacen esperar. Iniciamos en La Seca, con un recorrido, cata y vistas privilegiadas de los viñedos de Belondrade, para continuar con una visita a la Bodega Verdeal y continuar nuestro camino a Villaverde de Medina (zona emblemática de la Denominación de Origen) antes de llegar a Caserío de Dueñas, donde recorrimos una hermosa finca con una historia de cuatro siglos, rodeada de jardines y pinares. Además de sus 300 hectáreas de viñedo, cuenta con una casona castellana que funge también como hotel boutique bajo invitación, todo un lujo.
La visita termina con una cata y la oportunidad de disfrutar de platillos españoles, como lechazo al horno – cordero característico en la gastronomía de Castilla y León– acompañado con patatas y maridados con las etiquetas de la bodega. En una larga y fructuosa jornada, las actividades continúan en la bodega Emina, en Medina del Campo, cuyo nombre en latín significa amada. Fundada por el reconocido enólogo, viticultor y bodeguero Carlos Moro en los años 90, elaboran vinos blancos de guarda y espumosos.
Una cena en un restaurante en Serrada nos prepara para una gran experiencia: la vendimia nocturna. “¿Cuándo es ideal recolectar las uvas?”, nos preguntamos al llegar casi a medianoche a los viñedos y, mientras recorremos las parcelas, el vendimiador nos responde que se lleva a cabo en el momento justo de la maduración de la uva, un factor crucial para producir vinos de calidad.
Entonces, ¿por qué una vendimia nocturna y no una matutina? La respuesta es sencilla. Casi el 95 por ciento de la uva blanca cosechada es vendimiada de manera mecánica, generalmente durante las noches para así evitar la oxidación del mosto, que se acelera con el impacto de la luz solar y las altas temperaturas del día. Esta práctica permite también aprovechar mejor el frío en el interior de las bodegas. En el caso de la vendimia manual, es indispensable transportar las uvas en remolques construidos en acero inoxidable o protegidas con lonas para evitar que el mosto entre en contacto con el del remolque.
Día 4: Bodegas subterráneas y viñedos
El cuarto y último día inicia en Serrada con la bodega familiar De Alberto, con más de 350 años de antigüedad y famosa por sus bodegas subterráneas del siglo XVII. Seguimos ahora en Matapozuelos con una cata y recorrido en los viñedos de Garciarévalo y posteriormente nos dirigimos a Rueda para visitar El Hilo de Ariadna, bodega subterránea del siglo XV, donde nos aguarda una sorpresa: disfrutar del menú degustación de la Gastrobodega Martin Berasategui, restaurante del reconocido chef español que cuenta con doce estrellas Michelin.
Ya en Rubí de Bracamonte, cerramos la experiencia con una cata en Bodegas Pita y presenciamos la vendimia manual, realizada durante el día. Un recorrido, en definitiva, por una de las regiones vinícolas más importantes de Europa, con vinos que no dejan de ofrecer sabores frescos, vibrantes y con mucho carácter. Por eso Rueda es la región favorita entre los consumidores de vino blanco.
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Carácter de Rueda:
Clima continental. La Denominación de Origen Rueda se eleva entre los 700 y los 870 metros sobre el nivel del mar; es decir, nos encontramos con tierras llanas pero altas con una gran diferencia de temperatura entre el día y la noche, inviernos fríos y muy largos, primaveras cortas con heladas tardías y veranos calurosos y secos.
Variedad Verdejo. Uva autóctona que habita desde hace más de diez siglos en la región. Es la identidad de Rueda y representa el 88 por ciento de la producción. Destaca por su aroma, carácter, expresión frutal y por su sabor con matices a hierba de monte bajo. Rueda, sin embargo, también cuenta con otras variedades autorizadas como Sauvignon Blanc, Viura, Palomino Fino, Viognier y Chardonnay.
Suelo cascajoso. La D.O. Rueda se sitúa en el sector central de la depresión que forma el río Duero, constituyendo una altiplanicie de suaves relieves y vertientes sometidas a los vientos atlánticos. Tierras pardas, ricas en calcio y magnesio, de fácil laboreo y pedregosas. Aquí se asientan los mejores viñedos de esta Denominación de Origen.
Fuente: Consejo Regulador de la D.O. Rueda
1. Cuatro Rayas - Viñedos centenarios
Limpio y de gran intensidad. Con notas florales, notas de piña y anisados típicos de la variedad Verdejo. En boca es redondo y untuoso, muy graso. Envuelve el paladar.
- Maridaje: pescados y carnes a la brasa.
2. Emina - Verdejo
De alta intensidad aromática, cuenta con notas de maracuyá, pomelo, piña e hinojo. En boca presenta una excelente longitud y equilibrio entre sensaciones frescas. Acidez con elegante amargor.
- Maridaje: ensaladas, arroces, mariscos, pescados y quesos de baja curación.
3. Finca Montepedroso - Verdejo 2023
De intensidad alta, destacan sus notas de albaricoque, melocotón, hinojo, cáscara de almendra verde, anís y frutas secas que se mezclan con ligeros recuerdos de heno recién cortado y notas minerales.
- Maridaje: marisco fresco y pescados blancos, arroces, pastas gratinadas, aves y carnes blancas
4. Garciarévalo - Tresolmos Verdejo Classic
Aromas nobles y limpios de pera, piña y pétalos de rosa que dejan paso a los clásicos matices anisados y de hinojo fresco. Con recuerdos a cítricos. En boca es fresco, con buena acidez y fino amargor.
- Maridaje: aperitivos, pescados, mariscos, arroces, pastas, quesos no curados, carnes blancas y vegetales.