Para algunos la temporada de chiles en nogada es la más esperada del año. Y es que hay que esperar a que los ingredientes, que son más de 30, alcancen la madurez perfecta para preparar este platillo. La receta, como la conocemos, es de finales del siglo XIX, por lo tanto tiene infinidad de versiones, amantes y detractores, y además un debate continuo entre capeado o sin capear. La verdad, es que primero hay que probar las dos versiones y luego elegir un favorito.
Este año el platillo, considerado uno de los más representativos de la gastronomía mexicana, fue adaptado para llegar a todos, pues los cocineros los preparan con la misma maestría y los dejan listos para llevar a domicilio. Estas son las mejores opciones en la CDMX y estarán disponibles todo septiembre.
Nicos
Es una de las estrellas no sólo porque doña Elenita Lugo y el chef Gerardo Vázquez han preservado este platillo y agregado su toque, sino también porque utilizan siempre ingredientes de las huertas de Calpan, Puebla, y logran un balance perfecto entre los sabores de la carne, el chile, el relleno y, por supuesto, la nogada. Por primera vez, está disponible para llevar.
Precio: 499 mxn
El Cardenal
Sigue siendo una costumbre ir al centro de la CDMX a probar uno de estos chiles en nogada emblemáticos. Lo sirven capeado, pero también se puede pedir sin capear y la nogada, de textura tersa y suave, tiene un sutil dulzor que complementa el plato. El maridaje es un vino Cabernet Sauvignon.
Angelopolitano
El chef Gerardo Quezadas, que se especializa en cocina poblana, fusionó recetarios de cuatro generaciones con nuevas técnicas para hacer ocho versiones de chiles en nogada; desde el clásico, hasta el vegetariano pasando por el relleno de pato. La recomendación es maridarlos con tequila o vino rosado.
Precio: desde 295 mxn
El mural de los poblanos
Desde Puebla llega esta delicia a la CDMX, a bordo de Primario Food Truck y con la maestría del chef Luis Serdio. El paquete incluye un bolillo y un mollete de Santa Clara de la dulcería La Gran Fama. Las entregas solo se hacen en fin de semana, pero para aprovechar el viaje se pueden hacer pedidos extra de chipotles con nogada, mole poblano y bebidas tradicionales como la Pasita o el Rompope del restaurante.