El verano continúa e invita a disfrutar del sol, calor y días al aire libre, pero también a proteger nuestra piel y cuerpo debido a los cambios de la temporada. Por ejemplo, la exposición constante a los rayos UV, el sudor, el cloro o incluso la sal del mar, pueden provocar deshidratación, irritación e incluso acelerar el envejecimiento cutáneo.
Cómo mantener tu piel fresca y protegida en verano, según expertos

Durante esta temporada, muchas personas buscan sentirse más cómodas en su piel: luminosa, firme y libre de vello y existen algunos tratamientos y cuidados dermatológicos y corporales para lograrlo, pues además de lucir estéticamente bien, es sinónimo de salud y prevención.
“La piel es un órgano que responde al entorno, y en verano es cuando más se ve afectada. Por eso, es importante cuidarla con intención, no solo con productos tópicos, sino también con procedimientos que mejoren su salud y apariencia”, explica la Dra. Daniela Attili, dermatóloga en Dermédica.
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Cuidados clave para la piel y el cuerpo en verano
Protección solar constante
El protector solar debe convertirse casi en tu mejor amigo, durante verano y en cualquier estación del año. Expertos recomiendan aplicarlo en rostro y cuerpo todos los días, incluso dentro de casa y reaplicarlo cada cuatro horas para mantener su efectividad.
Limpiezas profundas e hidratación facial
El calor, sudor o maquillaje pueden obstruir los poros y causar brotes. Una limpieza profesional ayudará a mantener tu piel equilibrada y fresca.
Por si no lo viste:
Radiofrecuencia corporal
Expertos de Dermédica la recomiendan para mejorar firmeza y tonicidad de zonas como abdomen, brazos y piernas. Puede ser el complemento perfecto para quienes trabajasen metas de bienestar físico.
Tratamientos para calidad de la piel
Tecnologías como el microneedling con radiofrecuencia o el HIFU (Liftara 2) estimulan la producción del colágeno, mejoran textura y firmeza, y aportan un efecto lifting progresivo sin cirugía ni tiempos de recuperación largos.
Al cuidar y proteger tu piel (y no solo en verano) inviertes en tu salud a largo plazo. Una rutina personalizada, adaptada a cada temporada y con el acompañamiento profesional, te hará sentirse mejor contigo mismo.