No es un secreto, el peor enemigo de Checo Pérez este año ha sido él mismo.
Una inconsistencia inesperada tiene al piloto tapatío en medio de conversaciones que, más allá de elogiarlo o considerarlo como un volante a seguir en los siguientes Grandes Premios, cuestiona su capacidad para sumar puntos y afianzar su asiento para el 2024.
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En Red Bull Racing la sensación varía: mientras Pérez no ha cumplido del todo, Max Verstappen se coronó como campeón del Mundial de Pilotos por tercer año en fila, todo esto mientras se concentran en otro título del Mundial de Constructores.
Con 5 Grandes Premios restantes en el 2023, Pérez debe brillar para esclarecer cualquier duda.
Las decisiones en los detalles han mantenido a Checo un escalón por debajo de lo que espera. Esa concentración afilada que caracteriza a los pilotos de la máxima categoría ha mermado los resultados del mexicano.
La suerte también ha jugado un papel especial en la mala temporada de Pérez. El choque que el mexicano provocó en contra de Hamilton, durante la largada del Gran Premio de Japón, es un buen ejemplo de esta situación.
Ese incidente, producto de las circunstancias comunes de una largada en Fórmula 1, le costó sanciones al mexicano, quien terminó por abandonar esa carrera.
Ese y otros toques con sus compañeros de parrilla, en muchas otras ocasiones los libró, por lo que queda claro: la racha negativa parece manifestarse de distintas formas.
Saturday wasn't our best, but tomorrow's what counts. We'll fight to be on the podium 💪
En 17 carreras del 2023, Pérez suma 224 puntos y se mantiene como segundo lugar en el Mundial de Pilotos.
Abandonó solo una carrera (Japón) y ha formado parte de ocho podios, con dos victorias incluidas.
Asiento en Red Bull
Aún con los bajones de rendimiento y los roces con su coequipero, e incluso con el asesor de Red Bull Racing Helmut Marko, Checo Pérez parece tener su puesto seguro al menos por lo que resta del año.
Solo una catástrofe sería definitiva para que el mexicano sea sustituido, ya que el jefe de equipo de la escudería austriaca, Christian Horner , ha declarado que ”al interior del equipo la salida de Checo no es algo que hayamos platicado o siquiera considerado. Checo es nuestro corredor y queremos apoyarlo”.
La competencia entra en un ritmo de tres carreras casi conjuntas, Austin, México y Brasil, algunas de las preferidas por Pérez y en las que la afición mexicana lo arropa con especial cariño.
Antes de estos Grandes Premios, y con la mira puesta en mejorar su desempeño, Pérez viajó junto con sus ingenieros a la sede de su equipo en Inglaterra, en Milton Keynes, para rectificar algunas cosas y conversar con todo su entorno cercano.
Checo suele sumar puntos tanto en Austin como en México, y a bordo del RB19 debe aprovechar las últimas oportunidades en el 2023 para darle vuelta a las críticas y llenar los ojos de su escudería.
El Campeonato de Constructores está cerca para Red Bull Racing, y un doble podio en Austin y México los acercaría todavía más a la meta, además de frenar en seco las aspiraciones del tercer piloto de Red Bull, Daniel Ricciardo, quien desea el asiento de Pérez para la temporada siguiente.