La polaca Iga Swiatek, vigente campeona del Abierto de Estados Unidos, sufrió el domingo una inesperada eliminación ante Jelena Ostapenko que también la hará caer del número uno de la WTA, mientras Novak Djokovic dio el salto a los cuartos de final.
US Open: Djokovic da salto a cuartos de final
El astro serbio, que disfrutó de una cómoda victoria frente al croata Borna Gojo, tendrá que sofocar ahora la resurrección del tenis estadounidense para llegar a la final.
Por primera vez desde 2005, el país anfitrión colocó en cuartos de su Grand Slam a tres jugadores: Frances Tiafoe, Ben Shelton y Taylor Fritz, que será el primer rival de Djokovic.
En Flushing Meadows, que recibió el domingo a celebridades como el cineasta Spike Lee o la estrella de football americano Aaron Rodgers, la primera semana de competición dejó la gran bomba para el último partido, con la inesperada caída de la campeona Swiatek.
Por su lado, Novak Djokovic se deshizo el domingo sin dificultades de Borna Gojo, número 105 de la ATP, por 6-2, 7-5 y 6-4. El serbio tendrá que enfrentar ahora a rivales locales con el público de la mayor pista del mundo (23.000 espectadores) en contra en el camino hacia la final.
Taylor Fritz, noveno de la ATP, será el martes el primer oponente de Djokovic que, de avanzar a semifinales, se toparía con Tiafoe o Shelton. Todos ellos quieren inscribir su nombre como el primer estadounidense en coronarse en Nueva York desde Andy Roddick en 2003.
El serbio, que ha alcanzado los cuartos en Nueva York en 13 de sus 17 participaciones, nunca ha perdido con Fritz en sus siete enfrentamientos anteriores. Sin embargo el californiano, campeón de Indian Wells el año pasado, ha rendido a muy alto nivel en esta primera semana en Flushing Meadows y es el único jugador que no ha cedido un solo set y solo ha recibido un quiebre.
"Los partidos ahora solo van a ser más difíciles, pero estoy listo para ello", aseguró Djokovic.
Frente a Gojo, Djokovic disfrutó de todas las facilidades que le negó el viernes su compatriota serbio Laslo Djere, quien le obligó a levantar dos sets en una épica remontada de casi cuatro horas en la madrugada de Nueva York.