Y la audiencia ha respondido: con una media de casi 500 mil espectadores en directo por jornada en todos los canales y plataformas, según la organización, la final a cuatro de esta competición recién nacida se disputará el 26 de marzo en el Camp Nou, y ya hay 50 mil entradas vendidas.
"La idea nace sobre una reflexión respecto a por qué vemos que hay una parte de una generación joven que cada vez le cuesta más aguantar 90 minutos viendo un partido de futbol profesional", explica el director general del torneo, Oriol Querol.
Para mantener su atención, la Kings League les ofrece un carrusel de estímulos que se retransmite cada domingo desde un pabellón de la zona portuaria de Barcelona, con un pequeño aforo para invitados, pero accesible para todos por la plataforma de videos en directo Twitch.
En estos encuentros de 40 minutos está prohibido empatar, cada gol se celebra con pirotecnia y el espectador puede ver desde al Kun Agüero volver a las canchas vestido de Joker -el mayor pico de audiencia hasta ahora, que reunió a 1,3 millones de espectadores en directo-, a Casillas encajar un penal o al abuelo de Piqué sacando una carta que decidirá que un partido siga en uno contra uno.
Para este domingo, otro plato fuerte: la reaparición de Ronaldinho.
"Lo que pretendemos es que pasen cosas constantemente. Y la prueba es que las jornadas duran siete horas, y en las siete hay una base de audiencia bastante estable porque no les dejamos descansar", indica Querol.
Desde dentro
Para ello trabaja la veintena de personas que llenan la sala de realización, donde procesan la señal de las 17 cámaras distribuidas en la cancha, el palco o en el pecho del árbitro, además de las reacciones de los presidentes o las charlas de los entrenadores.
La acogida de la competición, que aún busca su rentabilidad económica, sorprendió a los propios organizadores.
"Pensaba que podía tener cierta aceptación porque hay grandes streamers involucrados y grandes exjugadores como Casillas y el Kun (...), pero es verdad que ha superado las expectativas de todo el mundo", cuenta el streamer Ibai Llanos.
Todavía vestido de corto, porque como presidente del equipo Porcinos acaba de lanzar un penal, la presencia de este carismático comunicador de 27 años fue uno de los grandes reclamos de la Kings League. Creador de contenido y empresario, Llanos comenzó narrando videojuegos y ahora es uno de los streamers más influyentes, al que sigue una fiel comunidad de 12,6 millones de usuarios en Twitch, los mismos que en Twitter.
Colaborador de Piqué en varios proyectos, Llanos ve mucho potencial a la Kings League, que en breve arrancará su edición femenina, tiene planeada una infantil y valora expandirse a otros países.
"Yo espero que sea una salida laboral más para mucha gente, para los propios jugadores, que vaya mejorando todo el tema de condiciones con el paso del tiempo, que haya mucha gente que pueda vivir alrededor del contenido de la Kings League", asegura.