Si de televisión mexicana se trata, el imaginario colectivo casi siempre apuntará a las telenovelas o a las comedias de Roberto Gómez Bolaños. Sin embargo, es justo que la historia de nuestra pantalla chica empiece a considerar otras opciones que, muy a su estilo, también hicieron historia, como sería el caso de Soy tu fan.
La serie es un fenómeno curioso por donde se vea. No es un proyecto original, sino un remake del show homónimo argentino. Tampoco fue realizada por una de las grandes cadenas del país, sino por la más modesta Once TV. Su trama no podría ser más normal, al abordar los problemas de un grupo de adultos jóvenes que parecen incapaces de encontrarse a sí mismos.
Eso sí, su éxito se concretó gracias a una serie de condiciones muy particulares, empezando por darse en un periodo en que la mencionada cadena sobresalió por sus estupendas historias. A esto sumemos la intervención de la casa productora Canana Films que fundada por Gael García Bernal y Diego Luna, fue determinante para la realización de producciones independientes de calidad en el país.
Finalmente, la presencia estelar de Ana Claudia Talancón, cuya amplia experiencia cinematográfica contribuyó al rompimiento de numerosos estigmas en torno a la calidad de nuestra pequeña pantalla.
No fue un éxito masivo, pero alcanzó el estatus de culto entre un nicho de la población que no tuvo problemas en identificarse con los conflictos completamente ordinarios del grupo central que batallaba en su transición a la madurez, lo que incluía dilemas amorosos, problemas laborales y una serie de decisiones para las que nadie parecía estar listo. Fue por esto que muchos padecieron con la abrupta culminación del proyecto tras su segunda temporada y los numerosos cabos sueltos que ésta dejó.
Lejos de resignarse, los aficionados presionaron hasta el cansancio con el fin de que la historia fuera retomada, al menos para obtener un cierre digno. Pasó más de una década para que los ruegos fueron escuchados: Soy tu fan finalmente está de vuelta. No sólo eso, sino que vuelve por todo lo alto con una película que continuará la historia en salas de cine.
Aún soy tu fan
Han pasado más de diez años de la segunda temporada de Soy tu fan. Por esto mismo, la adaptación cinematográfica no se desarrolla inmediatamente después del último episodio, sino luego de una década con Rocío (Maya Zapata) y Diego (Gonzalo García Vivanco) casándose e invitando a sus numerosos amigos en común, lo que incluye a Charly (Ana Claudia Talancón) y Nico (Martín Altomaro) . Un reencuentro casual, pero que invariablemente los obliga a enfrentarse con sentimientos que nunca desaparecieron del todo. ¿Se quedarán juntos esta vez?
La pregunta, recurrente entre los amantes del show, es más difícil de resolver de lo que muchos podrían suponer. Desde su paso por la televisión, la historia dejó en claro que no estábamos ante un cuento de hadas que apuntaba al final feliz, sino ante historias de vida normales y todo lo que esto significaba. Alegrías, sí, pero también tropiezos, dolores y errores con los que se debe aprender a vivir. Por esto mismo, el éxito del filme no depende tanto del desenlace romance entre la dupla estelar, como del hecho de que sea capaz de emular la esencia de la serie y de adaptarse a los nuevos tiempos que corren.
Esa frescura caló hondo en la banda que a la fecha sigue con fervor
“Era un contenido que no trataba como tonto al público, estábamos desparpajados hablando de las cosas que nos pasan, siendo como éramos en ese entonces. Esa frescura caló hondo en la banda que a la fecha sigue con fervor”, explicó Johanna Murillo en entrevista , quien diera vida a Fernanda. Sobre el salto a salas, aseguró que “fue pensar en cómo alguien madura o no lo hace en diez años, cómo crece o se estanca, fue hacer esa revisión, una retrospectiva […] y poder de ahí entender cómo alguien evoluciona”.
En este caso, el problema no son los sentimientos que están ahí, sino todo lo que gira alrededor de ellos. Han pasado diez años, Charly y Nico han construido sus vidas uno sin el otro e intentarlo nuevamente implica que tomen decisiones difíciles que les afectarán en diversos sentidos. Nadie dijo que la vida fuera sencilla y Soy tu fan siempre lo entendió a la perfección. Y es precisamente por esto que la historia tampoco podía terminar aquí.
La vida continúa
Hay historias que parecen tener potencial para continuar toda la vida y Soy tu fan es una de ellas. Después de todo, narra las altas y bajas de personas completamente ordinarias y como tal, no tiene mas que adaptarse a las diversas inquietudes suscitadas a través del tiempo. Imposible decir si la premisa se cumplirá, pero de lo que sí estamos seguros es que las desventuras de Charly y compañía no terminarán con su inmersión cinematográfica, sino que continuarán con una tercera temporada.
Los detalles son inciertos ya que dependen completamente de lo visto en la película, pero se sabe que fue rodada en secreto y que las filmaciones culminaron hace tiempo. Se desconoce, sin embargo, su fecha de estreno y si esta tendrá un final abierto con miras a nuevos proyectos o cerrado para concluir la historia de manera definitiva.
Tampoco nos descartemos por una conclusión de corte más ambiguo. Pues si hay algo que nos ha demostrado Soy tu fan es que no hay nada definitivo en esta vida y que sólo queda dejarse llevar confiando en que las decisiones tomadas en el camino sean las más acertadas o cuando mucho, las menos estrepitosas.
