Tras dos podios consecutivos y ser líder efímero durante la última carrera en Silverstone, el siete veces campeón mundial Lewis Hamilton parece remontar el vuelo gracias a las mejoras en su Mercedes.
GP de Austria: Hamilton espera lograr un nuevo impulso
El monoplaza del británico tuvo mejoras en la carrera pasada en el GP de Gran Bretaña.
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En Austria, este fin de semana, el líder Max Verstappen (Red Bull) será sin embargo el gran favorito a la victoria.
Con el 11º Gran Premio de los 22 de la temporada, Austria marca la mitad del curso y Verstappen tiene ya seguro entrar en la segunda parte del Mundial en cabeza de la general. El piloto neerlandés tiene 34 puntos de ventaja sobre el segundo, su compañero de Red Bull, el mexicano Sergio Pérez.
Respecto al monegasco Charles Leclerc (Ferrari) tiene 43 puntos de margen, mientras que Hamilton está en un discreto sexto puesto de la clasificación mundial de pilotos, a 88 puntos de Verstappen.
En las diez primeras carreras del año, Red Bull y Ferrari se han repartido las victorias, con siete y tres respectivamente. Mercedes, dominador en años anteriores, se conforma forzosamente con algunos podios (tres para Hamilton, tres para George Russell).
Las 'Flechas de Plata' no están teniendo su mejor año, pero en las últimas semanas hay cierto motivo para la esperanza.
La pasada semana, en el Gran Premio de Gran Bretaña en Silverstone, introdujeron nuevos desarrollos a su coche y, por fin, aparecieron en la pelea por la victoria.
El monoplaza de Hamilton llegó a encontrarse en cabeza durante la carrera, antes de terminar en el tercer puesto.
El octavo título mundial parece muy lejos para 'Sir Lewis', pero ganar su 104ª carrera parece cada vez más cerca.
Spielberg no es en principio un lugar tradicionalmente propicio para los Mercedes, como recuerda el patrón austríaco de la escudería, Toto Wolff: "Es un circuito muy diferente a Silverstone, que no nos ha venido bien en el pasado”.
Mientras en Silverstone dominan las curvas largas, en Austria la carrera se decidirá en las curvas 'lentas', algo que a Mercedes no le termina de convencer. En seis carreras desde 2018 en Austria, Mercedes ganó dos veces allí.
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