Djokovic elevó a 361 el récord de semanas pasadas como número uno, antes de pasar el testigo a Medvedev, subcampeón en el Abierto de Australia a principios de este año.
Medvedev será el tercer jugador ruso en ser número uno del mundo, tras Yevgeny Kafelnikov y Marat Safin. El último jugador ajeno al 'Big 4' en ser número uno de la ATP había sido el estadounidense Andy Roddick el 1 de febrero de 2004.
Para conservar la primera plaza del ranking, Djokovic tenía que hacerlo mejor en el torneo de Dubái que Medvedev en el de Acapulco (México), que se disputa también esta semana.
Djokovic regresó en esta cita emiratí sobre superficie dura a la competición oficial, por primera vez desde diciembre y la derrota de Serbia ante Croacia en semifinales de la Copa Davis en Madrid.
La estrella serbia ocupó titulares en enero por su retención y posterior expulsión el 16 de enero de Australia por no estar vacunado contra el covid-19. No pudo por lo tanto defender su corona en el Abierto de Australia, donde fue campeón Rafa Nadal, que sumó así su 21º título del Grand Slam, destacándose respecto a los 20 de Federer y del propio Djokovic.
En Dubái, Djokovic ha podido participar porque Emiratos Árabes Unidos no exige la vacunación para poder entrar en su territorio.
Necesito ritmo de juego, no tuve partidos en los últimos meses
"Me falta un poco de ritmo de partidos. Eso se nota, aún estoy buscando el ritmo en la pista", estimó el serbio. "Así son las cosas. Cuantos más partidos juegue, más cómodo estaré en la pista (...) Necesito ritmo de juego, no tuve partidos en los últimos meses", apuntó.
Con las normas actuales, Djokovic no podría entrar sin vacunarse a Estados Unidos para jugar el próximo mes en Indian Wells y Miami.