El club también se ha desprendido de jugadores con contratos altos como Luis Suárez, Iván Rakitic y Arturo Vidal, al cierre de la temporada pasada, en un intento de conseguir que los salarios estén en consonancia con las pautas de la Liga, que establecen una vinculación entre los mismos y los ingresos previstos.
"El impacto del COVID-19 hace que tengamos 200 millones menos de ingresos, hace que haya unas pérdidas de 97 millones y no los 11 millones de beneficios presupuestados", dijo Jordi Moix.
El club azulgrana estima que si no se hubiera producido la crisis del COVID-19, habría alcanzado los 1,059 millones de euros de ingresos.
La paralización del fútbol y su vuelta a puerta cerrada, la suspensión de la Euroliga de baloncesto, la caída del turismo, que redujo las visitas a las instalaciones del club o las ventas en sus tiendas, entre otros, provocaron la caída de ingresos.
Con información de EFE y Reuters