Paul McCartney confiesa que fue prisionero en una cárcel japonesa
No es novedad que las estrellas de rock suelen protagonizar momentos controversiales a lo largo de sus carreras, pero Paul McCartney dio a conocer una anécdota poco conocida y sí, un tanto sorpresiva.
En enero de 1980, McCartney y Wings, su banda en aquel entonces, viajaron a Tokyo para la onceava fecha de su tour por Japón. “En mi maleta, sí, había marihuana en mi maleta”, recordó Paul en el reciente episodio de The Late Late Show. La policía aduanal terminó por sorprenderlo y claro, llevarlo a prisión.
Los nueve días posteriores al incidente, el ex Beatle residió en la cárcel de aquella ciudad, en una pequeña celda; sin embargo, la condena pudo ser peor.
Debido a que las leyes antidrogas eran sumamente estrictas en aquella década, quien tuviera posesión de alguna sustancia se vería obligado a cumplir siete años de trabajo forzado, pero la salvación de Sir. Paul fue la fama.
A poco más de una semana como reo, el líder del cuarteto británico salió en libertad, para posteriormente ser deportado de la nación asiática; eso sí, no sin antes tomar un baño comunal con el resto de los prisioneros. “Era curioso estar en una tina con todos esos japoneses ”. Wings canceló el resto del tour y poco después se separaron.
Ve el resto del Carpool Karaoke con James y McCartney: