Ni hombre, ni mujer: hablemos de Imane Khelif y las personas intersexuales
En una clara violación a su privacidad y una deshumanización de la atleta argelina, los resultados de sus análisis de laboratorio y físicos fueron filtrados y expuestos.
Los exámenes médicos y análisis de laboratorio de la boxeadora Imane Khelif fueron filtrados, en una clara violación a su derecho a la privacidad y dignidad como persona.(Foto: Claudio Lavenia/Getty Images)
En una clara violación al derecho a la privacidad personal y médica de la boxeadora argelina Imane Khelif, su examen médico fue filtrado y se hicieron públicos los resultados no solo del análisis cromosómico, también la exploración física que se le realizó.
La prueba médica se realizó en el laboratorio del doctor Lal Path, de Nueva Delhi, y fue publicada por el medio 3 Wire Sports, por el periodista estadounidense Alan Abrahamson. En este, se indica que “el análisis cromosómico revela un cariotipo masculino”, es decir, el conjunto completo de cromosomas. Sin embargo, no es tan sencillo solo decir: masculino o femenino, puesto que la prueba completa de la atleta revela características tanto femeninas como masculinas.
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Por eso, vale la pena conocer más sobre las personas intersexuales y por qué el sexo no puede definirse únicamente por los órganos sexuales externos, también por cromosomas, genitales internos, gónadas, estados hormonales y características sexuales secundarias.
Ni hombre ni mujer: ¿qué es la intersexualidad?
Vamos paso a paso. El sexólogo César Galicia explica de una forma muy puntual este tema: el sexo no se trata de “tornillos y tuercas”, sino que se puede abordar más como si fuera una “cebolla”, porque tiene varias capas.
La Organización Mundial de la Salud explica que el sexo abarca las siguientes características :
Sexo cromosómico o génetico: cromosomas XY y XX.
Sexo gonadal: es decir, los testículos y ovarios y tienen como función producir hormonas.
Sexo hormonal: la testosterona (con mayor presencia en individuos mesculinos) y estrógenos y progesterona (con niveles más altos en individuos femeninos). Es importante decirlo: hombres y mujeres tienen los tres tipos de hormonas, solo que la proporción varía según el sexo y también el cuerpo.
Sexo reproductivo interno: con esto nos referimos al útero y cérvix en mujeres; prósteta y epididímo en hombres.
Sexo genital: pene y escroto en hombres; clítoris, vagina y labios en mujeres.
De ahí que la afirmación de Galicia nos acerque más al sexo humano visto como “una cebolla”.
Entendido lo anterior, podemos pasar al siguiente punto importante: al hablar del sexo biológico, no solo se trata de hombres y mujeres, también existen las personas intersexuales.
La propia OMS explica que se calcula que al menos 1.7% de la población total del planeta tiene características intersexuales, aunque esta es una cifra conservadora, puesto que incluso al hablar de intersexualidad hay variaciones importantes.
¿Qué es una ‘persona intersexual’?
El término intersexual describe a todas las personas que tienen cuerpos que no coinciden con lo estrictamente masculino o femenino y puede aparecer de maneras muy diversas.
¿A qué se refiere con que las personas intersexuales tienen características de ambos sexos? Pues… a eso: a nivel cromosómico puede haber una carga masculina importante, pero el sexo genital o el reproductivo interno puede presentar características femeninas, o viceversa.
Aquí una pausa para anotar que el sexo biológico es completamente ajeno a la identidad de género o la orientación sexual.
Continuemos. Ahora bien, si nos avocamos a la composición genética de una persona, también hay un amplio mosaico. Sí, el más común es XY (hombres) y XX (mujeres), pero también hay variaciones como XXY e incluso X0. Sí, las variaciones son amplias.
La Asociación de Intersexuales de América del Norte explica que en realidad no es la naturaleza la que decide darle una categoría masculina, femenina o intersexual a las personas, sino los propios humanos (casi siempre los médicos) son quienes deciden eso.
¿Imane Khelif es intersexual?
Eso es algo que no se ha definido aún médicamente. Ahora bien, la filtración del análisis médico (tanto físico como de laboratorio) y posterior publicación por Alan Abrahamson, fue una clara violación al derecho de Khelif a la privacidad y a que sea ella misma quien decida cuándo, cómo, dónde y bajo qué circunstancias hablar de un tema personal, es un asunto que deberíamos abordar socialmente.
Imane Khelif ganó el oro en los Juegos Olímpicos 2024.(Foto: Richard Pelham/Getty Images)
Más allá de “hallazgos anormales” –como el sitio 3 Wire Sports bautiza a los resultados médicos–, estos podrían corresponder más a las características de una persona intersexual.
Además del examencromosómico de la boxeadora argelina, el expediente físico médico reveló que posee características sexuales internas y genitales tanto femeninas como masculinas.
Y si es así, ¿cómo es que la atleta de 26 años fue considerada para la rama femenil en las competencias de boxeo internacionales? Siendo de un país tan conservador como Argelia, donde cualquier expresión de género distinta al binarismo u orientación sexual que no sea la heterosexual es perseguida y penada por las autoridades, Khelif fue criada como mujer porque (y eso es algo muy común durante los nacimientos) sus características físicas externas corresponden a las femeninas.
Con la información filtrada, así como públicamente se le ha negado a Imane Khelif su feminidad, tampoco podemos afirmar que “es hombre”.
¿Qué sigue? Ahora será responsabilidad de la World Boxing, organismo que anunció que exigirá una prueba genética de sexo a las y los participantes, cómo integrará a las personas intersexuales en las categorías tradicionales que no contemplan su existencia.
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Nota al pie: a pesar de que el expediente médico de la boxeadora fue filtrado y es de carácter público, ni la atleta ni su equipo han hecho algún comunicado oficial, por lo que en Life and Style nos abstenemos de revelar detalles específicos de los resultados de los análisis.
