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Tras 5 años del incendio, Notre Dame prepara su apertura

Ya hay fecha para que la reconocida catedral pueda ser visitada por miles turistas de todo el mundo. Estos son los detalles.
jue 07 noviembre 2024 03:04 PM
Notre Dame
Notre Dame.

El incendio que destruyó en 2019 la catedral de Notre Dame de París había consternado al mundo entero, pero cinco años después, ha recuperado su esplendor y se prepara para recibir a sus primeros visitantes el próximo 7 de diciembre.

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Cuando las llamas consumieron el 15 de abril de 2019 una de las catedrales más icónicas de Occidente y declarada patrimonio mundial por la Unesco, el impacto fue global. Con casi 1000 años de historia, Notre Dame inició su construcción en 1163 y se completó en 1345, destacando por sus gárgolas y su imponente arquitectura gótica.

Cinco años de una obra titánica, en la que participaron 250 empresas y cientos de artesanos, con una inversión de casi 700 millones de euros (unos 770 millones de dólares) financiados por 846 millones de euros en donaciones provenientes de 150 países, logró que Notre Dame renazca de sus cenizas.

La aguja reconstruida

La reconstrucción de la emblemática aguja, una alta torre puntiaguda que se desplomó ante la mirada atónita de millones de personas, marca un símbolo de la restauración de la catedral.

La nueva aguja es una réplica exacta de la diseñada en el siglo XIX por el arquitecto Eugène Viollet-le-Duc. Aunque todavía hay grúas y andamios alrededor de esta joya parisina, la obra se encuentra en su etapa final, de acuerdo con el organismo público que la supervisa.

En la explanada junto al Sena, turistas se congregan diariamente tras las vallas coronadas con alambres de púas en algunos lugares para intentar ver los últimos trabajos exteriores, que incluye colocación de un nuevo pavimento de losas de piedra caliza frente al gran portal principal.

En 2017, Notre Dame recibió a 12 millones de visitantes. Ahora, diócesis y el organismo público esperan entre 14 y 15 millones de visitantes tras la reapertura, que incluirá nueva señalización, un rediseño del flujo de visitantes y un sistema de reservas en línea.

En octubre, el gobierno francés planteó la posibilidad de cobrar entrada a los turistas, reabriendo el debate sobre la financiación del patrimonio religioso.

Los fieles y visitantes que ingresen a la catedral descubrirán un eje central despejado, mobiliario litúrgico minimalista en bronce oscuro, un muro-relicario moderno de bandera de cedro y vidrio con una aureola que alberga la corona de espinas de Cristo, y un ambiente iluminado como nunca antes, restaurado en su totalidad.

Asimismo, las paredes, ennegrecidas por el incendio y el tiempo, han recuperado la claridad.

Los vitrales, que no resultaron dañados por el fuego, fueron limpiados y restaurados, resaltando sus colores vivos junto con las decoraciones pintadas en las capillas por Viollet-le-Duc, que contrastan con el suelo ajedrezado en blanco y negro.

El público también redescubrirá los grandes "mays" restaurados, unos grandes cuadros destinados al altar y que eran encargados cada año en el mes de mayo a grandes artistas, entre 1630 y 1707, por la corporación de orfebres que los regalaba a la catedral.

El templo ha recuperado sus ocho campanas y recibe este jueves la que presidió el Estadio de Francia durante los Juegos Olímpicos.

Con información de AFP

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