El primero de la lista es el ajo, este se utiliza desde hace décadas para prevenir los catarros, resfriados o gripes. Junto a este están otros productos que ayudan a reforzar el sistema inmune como es el caso de la calabaza, el kiwi o la mandarina.
Para el caso del ajo, este mejora la respuesta del organismo ante el ataque de virus y bacterias, sirve para combatir la tos y con sus propiedades mucolíticas ayudan a expulsar los mocos en procesos gripales y catarrales. Cuenta con una importante sustancia rica en vitamina C, calcio o fósforo.
Muchos expertos recomiendan tomar el ajo crudo para garantizar su eficacia aunque no es lo más apetecible por su intenso olor y sabor, en algunos casos se toma como una pastilla pasada con agua. Algunos remedios para que se haga menos complicado tomarlo es el masticar algo de perejil o betabel después de tomarlo o beber un jugo de limón.
Si tienes dudas de como incorporar el ajo a tu dieta o sus propiedades consulta con tu médico de cabecera.