Razones tras la prohibición
Google Play es más que el sitio de descargas de Google. Es un espacio con reglas específicas que deben ser cumplidas por los usuarios, pero también por los desarrolladores. No ha sido el caso de Truth Social, cuyo afán con la libertad de expresión –un término bajo con el que se ha descrito desde su concepción– ha resultado contraproducente para sus intereses.
"Notificamos a Truth Social sobre varias violaciones de las políticas estándar”, aseguró un vocero de Google, reportó BBC . "Tener sistemas efectivos para moderar el contenido generado por el usuario es una condición de nuestros términos de servicio para que cualquier aplicación se active en Google Play", agregaron.
Esto ya es un problema en cualquier red social que continuamente debe implementar todo tipo de filtros para buscar la sana convivencia de los usuarios. Lo es más aún para una que, según incontables reportes, promueve la intolerancia y los discursos de odio. Más grave aún es que muchas de las cuentas que más lo hacen están verificadas.
Un ejemplo de esta crisis ocurrió hace apenas unas semanas cuando un usuario de nombre Rick Shiffer publicó un “llamado a las armas” en Truth Social al tiempo que invitaba a estar “listos para el combate”. Su nombre coincide con el sujeto que el pasado 12 de agosto fue muerto por las autoridades cuando intentó entrar por la fuerza en unas instalaciones del FBI ubicadas en Cincinnati.
Especialistas coinciden en que, si bien estas situaciones pueden apreciarse en todas las redes, las tensiones se incrementan a niveles insospechados cuando la moderación pasa a segundo término cuando realmente debería ser una prioridad en todos los sentidos. Irónicamente, la plataforma sí que tiene restricciones de contenido, pero de momento no tiene la capacidad para dar seguimiento a las publicaciones para verificar que las reglas sean cumplidas. Todo esto ha promovido una idea concebida desde que el proyecto fue anunciado: que el espacio ideado por Donald Trump no fue pensado para lo comunidad como lo han sido el grueso de estas plataformas, sino que se trata de un sitio exclusivo para extremistas que anhelan recuperar el poder para el exmandatario a como dé lugar.
Problemas para Truth Social
Desde que Truth Social fue anunciada, se especuló de los muchos problemas que tendría para abrirse camino. Esto porque, a diferencia de las principales redes, que van dirigidas al público general y gozan de segmentaciones internas de corte orgánico –digamos, los grupos en Facebook o los hashtags en Twitter e Instagram–, la de Donald Trump siempre apuntó a un nicho muy específico y sin considerar puntos medios. Un arma de doble filo que podía conducir al éxito o al fracaso. Aun así, se apostó en ella ante la popularidad del exmandatario y confiando en el respaldo de los principales canales de descarga.
Por esto, su ausencia en Google Play es un obstáculo mayúsculo. Se trata del mayor sitio de descargas para usuarios Android y como muestra del impacto basta con remitirse a la escalada en sus números, que de 55 millones de descargas globales en 2016 ha pasado a las 111.3 en 2021, un número que promete continuar en aumento para 2022.
Para colmo de males, esto ha provocado que las miradas quedan puestas en Apple, que el pasado mes de febrero aprobó a la aplicación en medio de una enorme controversia. Llegó a posicionarse como la más descargada, lo que no ha evitado que muchos insistan en que debería ser erradicada al tratarse de un espacio de promoción para la intolerancia. El mundo espera la siguiente jugada de la manzana.
Estas descargas son determinantes para que Truth Social pueda cubrir todas sus deudas, entre las que sobresalen los 1.6 MDD con la empresa de infraestructura de internet RightForge. Aunque ésta se dice comprometida con los ideales de Donald Trump, la falta de pago podría quitar a la plataforma el espacio de alojamiento necesario para operar. Esto, a su vez, afecta directamente en las intenciones de Donald Trump por regresar a la presidencia de los Estados Unidos, recordando que buena parte de su éxito fue por su continua presencia en redes sociales.
Es pronto para decir si la red de Donald Trump desaparecerá, pero las cosas no pintan nada bien para la plataforma. Quizá la única verdad que nos deja este espacio virtual es que el mundo no necesita de un sitio cuyas bases parecen apoyarse de lleno en el odio y violencia.
