No dejes que afecte tu trabajo
Es común que al tener un jefe horrible no nos den ganas de trabajar y que, por ende, nuestros resultados no sean los de siempre. No dejes que eso te suceda. No sólo te hará quedar mal con otras personas importantes en la empresa, sino que, en caso de que tu jefe se la traiga contra ti, le darás razones para despedirte.
¿Es un jefe horrible o sólo te cae mal?
Primero intentemos ser objetivos. Antes de tratar de reformar a nuestro jefe horrible, hay que asegurarnos de que realmente lo sea. Obsérvalo durante unos días tratando de ser imparcial, y nota cuántas cosas hace bien y cuántas mal. Cuando haga algo mal, trata de imaginar la razón de sus acciones. ¿Realmente es su culpa, o es algo fuera de su control?
Entiéndelo
No decimos esto de forma “pobrecito, entiéndelo”, sino más en el sentido de que analices por qué hace lo que hace. ¿No hace nada para irse temprano y estar con su familia? ¿Se cuelga los éxitos ajenos porque sabe que en realidad no es tan bueno? ¿Sólo le interesa la fama? Por ejemplo, quizás les haga trabajar horas extras y piensas que es por tirano, pero tal vez lo único que quiere es que todo el equipo sobresalga entre el resto de la empresa (o quizás simplemente es un ser nefasto. Ambas razones son posibles). Entender estos puntos te ayudará a saber con quién estás lidiando y de dónde viene su (mal) estilo de liderazgo.
Siempre mantente un paso adelante
¿Recuerdas ese momento en The Devil Wears Prada en el que Miranda Priestly le pide a Andy Sachs un manuscrito de Harry Potter para sus hijas, y ella no sólo lo consigue sino que lo encuaderna y se lo manda a las hijas de Miranda? Sé Andy Sachs. Esto es especialmente importante si tu jefe es un micromanager insoportable. Con acciones como estas le harás ver que no necesitas supervisión constante porque conoces tus responsabilidades.
Establece límites
Esto aplica en muchos escenarios. ¿Tu jefe es grosero y humillante? Déjale claro que eres un profesional y que no vas a estar aguantando malos tratos. ¿Manda mensajes a horas descomunales? No contestes hasta que sea horario godín. Si tu jefe no tiene límites, te corresponde a ti ponerlos.
Conviértete en el líder
Cuando tienes un jefe incompetente, alguien tiene que tomar las riendas, y tú puedes ser esa persona. Si conoces bien los objetivos y procesos de tu área, puedes lograr cosas grande, y la gente naturalmente comenzará a seguirte. Así, te convertirás en una especie de jefe informal. Y en el mejor de los casos, gente importante notará tu iniciativa.
Usa la psicología a tu favor
Especialmente, los tips que dan en terapia de parejas. Cuando tengan un desacuerdo, repítele lo que dijo y pregúntale: “¿eso es lo que quieres decir?”. Si dice que sí, dile que te platique más. Cuando le repites a alguien su propia perspectiva le das una oportunidad de exponer su punto y sentirse comprendido… y así es como se apaga un incendio godín.
Evita jefes horribles en el futuro
Esto es lo más ñoño que puedes hacer en la vida, pero si tienes una facilidad extraordinaria para caer en manos de jefes nefastos, podría salvarte. Cuando apliques para un trabajo, investiga antes de tiempo. Si puedes, invita a un par de empleados por un café para “conocer la empresa y su cultura”. Y sí, pero secretamente puedes investigar un poco sobre la persona que será tu jefe.