Asteroides
Otro estudio, también publicado en Nature Astronomy, aporta la prueba química de que se trata de agua molecular.
El telescopio aerotransportado del Observatorio estratosférico para astronomía infrarroja (SOFIA) ha proporcionado nuevos datos, gracias a la observación de la Luna en una longitud de onda más precisa que antes: 6 micrones en vez de 3. Y, por primera vez, los investigadores pudieron diferenciar la molécula H2O (la fórmula química del agua) de otro compuesto químico (hidroxilo, OH) con el que aparece mezclada.
¿De dónde viene esta agua? Probablemente de la caída de asteroides que chocaron contra la Luna hace miles de millones de años. Lo mismo que se cree que ha ocurrido con la Tierra. Las moléculas de agua expulsadas durante la caída de estos cuerpos habrían caído al fondo de estos cráteres, donde quedaron "atrapadas para siempre" por el frío, explica Francis Rocard, especialista en sistema solar del Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES).
Si se logra desarrollar técnicas de extracción, esto representaría un recurso potencial para futuras misiones espaciales, principalmente la futura miniestación Lunar Gateway.
Para futuras misiones tripuladas a Marte, por ejemplo, se podría "despegar de la Tierra, hacer una parada en la 'estación de servicio' que será la Lunar Gateway, desde donde se enviarían sondas a la superficie lunar para recoger agua y así abastecer a la tripulación que realiza el viaje a Marte", añade Francis Rocard, quien no ha participado en los estudios.
"Esto abarataría el costo del programa, porque es más barato que llevar agua desde la superficie de la Tierra", explica el astrofísico francés, haciendo hincapié en que el viaje a Marte dura seis meses.