Razones para visitar Tequila, Jalisco, siempre sobran. La más obvia, desde luego, podría ser recorrer la cuna del destilado que a lo largo de los años ha colocado a México en el radar de los fanáticos del agave azul y de todas las posibilidades que ofrece con sus propiedades aromáticas, gustativas y de añejamiento.
Tequila y el lado más artístico de Reserva de la Familia
Si bien mi más reciente visita a este Pueblo Mágico fue resultado de una invitación de la casa José Cuervo, tengo que decir que, además de brindarme la oportunidad de sumergirme en las profundidades del proceso de elaboración del tequila, también fue una oportunidad para conocer la visión de uno de los artistas mexicanos más respetados tanto nacional como internacionalmente. En esta ocasión, todo giró en torno a la nueva edición de arte presentada por Reserva de la Familia –el tequila más emblemático de José Cuervo por su herencia y artesanía– de la mano de Gonzalo Lebrija.
El hotel Solar de las Ánimas se convirtió durante tres días en el centro de reunión de periodistas, amigos de la marca, coleccionistas y líderes de opinión que viajaron hasta esta tierra de propiedades volcánicas para recorrer los campos de agave de la casa, visitar La Rojeña, la destilería de tequila más antigua propiedad de José Cuervo, catar las distintas expresiones de este tequila, participar en una serie de comidas y cenas y para descubrir todos los detalles del proceso creativo de Lebrija, cuyo resultado fue una serie de cajas de edición limitada inspirada por su serie de pinturas conocida como Veladuras.
Desde 1995, Reserva de la Familia ha trabajado con artistas reconocidos internacionalmente para crear ediciones especiales que, además de contribuir a la democratización del arte, generan un espacio de expresión personal. Un equipo de curadores –entre los cuales se encuentran Juan Domingo Beckman, CEO de Casa Cuervo, Patrick Charpenel, director del Museo del Barrio en Nueva York, y Zélika García, fundadora de Zona Maco– está a cargo de la selección de los creativos que han materializado estas 25 ediciones.
En el caso de Lebrija, quien nació en la Ciudad de México pero que creció y fue educado en Guadalajara, la inspiración llegó a partir de la observación del paisaje agavero y de los efectos de la luz sobre él en distintos momentos del día. A través de un minucioso estudio fotográfico, Lebrija seleccionó cuatro paletas de colores con las cuales fueron intervenidas las cajas de esta edición especial que también es un reflejo de su trabajo personal, especialmente de una serie pictórica que toma elementos de la papiroflexia y de la superposición de capas de color.
“Un producto tan sofisticado como el tequila Reserva de la Familia, no podía estar solamente en un estuche. Tenía que estar resguardado necesariamente por una caja que estuviera a la altura y que de alguna manera reflejara su complejidad. Por esta razón, Reserva de la Familia decidió desde 1995 invitar a algún artista importante de orígen mexicano o que tenga un vínculo fuerte con el país a crear esta edición tan especial”, explicó Charpenel durante la presentación oficial.
“Mi trabajo tiene mucho que ver con la idea de la suspensión del tiempo. Cuando me invitaron a hacer esta caja, comencé a preguntarme qué pasaría si se hacían veladuras con serigrafía. En la caja son cuatro colores los que se utilizan, pero lo traslúcido de las capas permite que se generen otros colores. Los colores se basaron en la gama cromática del paisaje agavero. Eso significó visitarlo en diferentes horas –en la madrugada, el día, al atardecer– y notar los cambios. Hay oros, ocres, platas, azules, verdes… una infinidad de gamas maravillosas e increíbles. De la selección de los colores de los distintos momentos del día surgió la combinación utilizada en cada una de las cajas”, sostuvo Lebrija.
Por más de 25 años Reserva de la Familia ha mantenido una estrecha relación con el mundo del arte. Esta edición es un refrendo de su compromiso con la promoción cultural de nuestro país y no había un mejor exponente de las raíces jalicienses que Gonzalo Lebrija. Este año, son cuatro cajas especiales, pero esperamos que la familia siga creciendo durante, por lo menos, 25 años más. Me despido invitándolos a seguirme a través de mi cuenta de Instagram para saber cuál es mi paradero en tiempo real.