Dedicarle un día al turismo es dedicarle un día a los viajes que nos han marcado y que han significado un parteaguas en nuestras vidas. Es también recordar que cada viaje es una oportunidad de aprendizaje y descubrimiento, un espacio para conocer nuevas realidades y, a partir de ellas, alimentar el respeto a la diversidad. Y, desde luego, es un día para agradecer a todas las personas que con su trabajo hay ayudado a crear recuerdos inolvidables.
Si bien la agitación y las restricciones a los viajes hacia algunos destinos internacionales plantean retos importantes en estos momentos, esta podría ser una oportunidad para volver la mirada al territorio nacional y planear unas vacaciones –tomando todas las medidas de prevención y seguridad– a ese destino poco explorado que siempre hemos querido visitar. Tal vez sea momento de hacer ese road trip en familia que tantas vueltas nos ha dado por la cabeza, de escaparnos con nuestra pareja en un fin de semana romántico o de realizar ese viaje en solitario al que aún no nos atrevemos.