7 razones hedonistas para viajar a Ensenada
Baja California es conocido como el primer productor de vino en México. Sólo en este estado hay más de 70 casas vinícolas que abren sus puertas para conocer los procesos y vivir exquisitas catas con diferentes temáticas.
Además, el clima les permite tener, además de vinos excepcionales, otros productos que son el sueño de cualquier cocinero: aceite de oliva y costas en las que adquirir pescados y mariscos fresquísimos. De la buena comida que se vivía en este estado surgieron cocineros reflexivos y creativos que marcaron el inicio de una nueva y renombrada escena gastronómica.
Por eso mismo, viajar a Tijuana y Ensenada resulta algo pardisíaco para golfistas, exploradores, nostálgicos y, sobre todo, para aquellos apasionados de experiencias gastronómicas.
Algunos de los restaurantes más destacados de México se concentran en estas dos ciudades y el destino obliga a planear el viaje en función de lo que se ofrece para los amantes de la gastronomía.
Estos son algunos restaurantes nominados a los Gourmet Awards 2015 que, estando en Ensenada o Tijuana, son absolutamente imprescindibles.
Una cocina sustentable, orgánica y artesanal en la que jugadores como el mezquite, las carnes de granja, producciones de la huerta y un sentido prodigioso de espontaneidad son parte integral del discurso creativo del chef Javier Plascencia para despertar los cinco sentidos.
Un local que resulta ser estacional al extremo. La cocina de Diego Hernández Baquedano se crea y regenera sólamente a partir de lo que está en temporada. Su propio huerto aporta la mayoría de la producción y el chef aprovecha la creatividad para resaltar los aromas y sabores en cada etapa de cada una de las plantas.
Desde el 2000, Manzanilla se ha preocupado sobre todo por ofrecer productos fresquísimos. Benito Molina y Solange Muris crearon una mezcla excepcional entre los sabores mediterráneos y la cocina mexicana. Los pescados y mariscos, el vino y el aceite de oliva son aliados y protagonistas en la cocina de estos chefs.
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En pro de la convivencia y el disfrute, en este restaurante se ahorran todo acto protocolario y se concentran sólamente en los sabores y la frescura de sus insumos. Los menús los determinan el huerto, el viñedo y la creatividad del chef Jair Téllez con su compromiso por servir sólo aquello que está en temporada.
De la leche de las cabras del rancho, hacen el queso de cabra y del huerto, recogen los jitomates que luego rostizan en la cocina que se encuentra al final del comedor y de la que destaca el horno de piedra. Así de honesta, real y natural es la cocina de Roberto Alcocer.
La leña de mezquite con que se cocinan los productos que llegan de huertas, granjas y rancherías locales es uno de los principales acentos de la cocina del chef Javier Plascencia. Finca Altozano es una versión campirana y auténtica de los mejores sabores que ofrece el Valle de Guadalupe.
Un lugar en el que resalta el sentido industrial de las prensadoras y curtidoras de su decoración que se se fusionan perfectamente con el paisaje. El chef Alejandro Álvarez toma lo que tiene a la mano, lo combina con sus productos del huerto y lo asimila todo dentro de una propuesta contemporánea de cocina bajacaliforniana.
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