La pasión por la mecánica llevó a los relojeros de Richard Mille a desarrollar una pluma enteramente mecánica, un verdadero logro, ya que anteriormente otras marcas sólo habían dotado a las estilográficas de movimientos decorativos, no por nada el desarrollo de esta innovación les llevó a los relojeros cuatro años.
Mediante un pulsador localizado en la parte superior del movimiento de tipo baguette, es decir vertical, se libera el plumín de oro gris que posteriormente se retracta al colocar la tapa. Este pequeño mecanismo ha sido fabricado en titanio, tanto para la platina como para los puentes, mientras que el cuerpo de la pluma mecánica, es de carbono NTPT y usado en la fabricación de material aeronáutico, lo que permite las caprichosas formas, haciéndola única. Este ejemplar se encuentra numerado y firmado por Richard Mille. Su precio, por si te lo preguntabas, ronda poca más de los 100 mil dólares.
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