Lo de Glen Powell por el cine es amor, uno que inició en su infancia mientras imaginaba que dirigía escenas de sus películas favoritas, como Tiburón (1975), de Steven Spielberg. Ese sentimiento se ha mantenido vivo a lo largo de los años y ha ido evolucionando hasta convertirse hoy en una visión de negocios y también en una filosofía de trabajo.
Entrevista | Las muchas caras de Glen Powell y su amor por el cine
Probablemente solo sus mayores fanáticos sepan que uno de sus primeros trabajos como actor lo realizó en 2003 a las órdenes de Robert Rodriguez en Spy Kids 3-D: Game Over y otros lo ubiquen mejor por su participación en proyectos como Los indestructibles 3 (2014), Talentos ocultos (2016) o Devotion (2022).
Lo que es indiscutible es que Top Gun: Maverick (2022) lo lanzó a la fama global y que el estadounidense ha aprovechado esa plataforma para demostrar su versatilidad como actor e, incluso, fundar su propia casa productora, con la que ha materializado proyectos como la serie Chad Powers (2025).
Este 13 de noviembre se estrenará en México The Running Man, un remake del filme de 1987 protagonizado por Arnold Schwarzenegger basado en la novela homónima de Stephen King.
Bajo las órdenes de Edgar Wright, Powell se mete nuevamente en la piel de un héroe de acción para contar una historia distópica que en su momento estaba ambientada en un futuro que resuena con nuestro presente. Enlazados vía telefónica, Powell responde preguntas acerca sobre la película y los proyectos que ocupan su tiempo y energía, muchos de los cuales le están dando la oportunidad de explotar su talento desde distintas perspectivas.
Life and Style (LS): La novela de Stephen King en la cual se basa The Running Man fue publicada en 1982 y estaba ambientada en 2025. ¿Por qué crees que esta historia sigue teniendo relevancia más de 40 años después?
Glen Powell (G.P.): Lo que me impresiona personalmente de Stephen King y su novela original es cómo sigue siendo relevante a pesar de haber sido escrita a principios de los ochenta y de todo lo que sucede en el mundo en 2025. La forma en que la gente común se relaciona con el mundo, las estructuras de poder y el ciclo de las noticias, todo esto juega un papel importante en la historia que estamos contando. Me resulta interesante que todos conozcan y amen ese libro, y que desde su origen haya sido ambientado en 2025. Es un ejemplo de cómo la ciencia ficción puede iluminar el momento en que nos encontramos.
LS: ¿Qué rol interpretan en la actualidad los héroes de cine?
G.P.: Siempre me han atraído las historias de personas ordinarias enfrentándose a situaciones extraordinarias. Ben Richards es ese tipo de personaje: un hombre común, un héroe de clase trabajadora que busca proveer a su familia y a sus seres queridos de lo que necesitan. Está dispuesto a hacer lo que sea necesario para salvarlos. No creo que sea el prototipo clásico de héroe de acción; creo que los héroes vienen en todas las formas y tamaños.
LS: ¿Te ves como el héroe de acción de las nuevas generaciones?
G.P.: Soy un actor al que le encanta participar en todo tipo de películas y géneros. Soy un fanático del cine en su sentido más amplio. Quien me conozca sabe que no tengo un género favorito exclusivo y disfruto de ver todo tipo de propuestas. Para mí, contribuir a difundir el amor por el cine de acción es algo que disfruto muchísimo, pero no es el único camino en el que quiero estar.
LS: ¿Qué nuevas facetas profesionales te gustaría explorar?
G.P.: Hay muchos aspectos del cine que me gustaría explorar. Acabo de fundar una productora llamada Barnstorm junto a mi amigo Dan Cohen. En ella, somos socios productores y nos involucramos en distintos tipos de proyectos y géneros, que era uno de nuestros objetivos al crear la compañía. Me siento muy afortunado de poder participar en la creación de estas películas desde cero, ya que nunca me ha gustado quedarme sentado esperando a que el teléfono suene. Creo que en los próximos años tendremos la oportunidad de servir a diferentes tipos de audiencias de maneras que no se han visto antes. No quiero aburrir a las audiencias; lo que busco es desafiarme constantemente y mostrar diferentes facetas de mí mismo.
LS: ¿En qué tipo de proyectos quieren enfocarse con Barnstorm? G.P.: Una de las cosas que me entusiasma de lo que estamos creando en Barnstorm es que no distinguimos entre proyectos críticos y comerciales. Para nosotros, crear películas que se vean en el cine con la más alta calidad también puede ser un excelente negocio. Nos centramos en entregar proyectos de gran calidad para las audiencias. Estoy muy interesado en colaborar con otros actores y cineastas en proyectos que realmente los emocionen, y en contar historias que les interesen a ellos y a sus públicos.
Fuera de la pantalla, creo que mi rol como ser humano también es ese: intentar dejar una huella positiva en el mundo, apoyando a mi familia, mis amigos y mis fans. Es una experiencia maravillosa hacer historias que la gente verá y disfrutará, y asumo con gusto esa responsabilidad
LS: ¿Cuál crees que es tu responsabilidad como actor para con el público?
G.P.: Al final del día, mi trabajo como actor consiste en dar lo mejor de mí para que las audiencias disfruten de la mejor historia cuando lleguen al cine. Como actores, debemos ganarnos cada centavo que pagan, ofreciéndoles una gran historia. Fuera de la pantalla, creo que mi rol como ser humano también es exactamente ese: intentar dejar una huella positiva en el mundo, apoyando a mis amigos, mi familia y mis fans. Es una experiencia maravillosa hacer historias que la gente verá y disfrutará, y asumo con mucho gusto esa responsabilidad. Como admirador de grandes cineastas y actores, creo que no hay un privilegio más grande.
LS: ¿Consideras que la actuación es un vehículo de crecimiento personal?
G.P.: Una de las cosas que amo de este trabajo es que nos brinda la oportunidad de reflexionar y analizar nuestra humanidad: quiénes somos y quiénes queremos ser. Creo que en este oficio hay un constante análisis de nuestros pensamientos y sentimientos, y disfruto mucho eso. Es una exploración constante de lo que significa ser un humano, de lo que estamos dispuestos a hacer y de cómo podemos mejorar. Me encanta meterme en la piel de otras personas.
LS: ¿Con qué director mexicano te gustaría trabajar?
G.P.: Hace poco, tuve la oportunidad de cenar con Alejandro González Iñárritu en Londres y creo que conectamos muy bien creativamente. Me encantaría colaborar con él en algún momento. Al final del día, soy muy abierto respecto a que el trabajo que he hecho en pantalla refleja las oportunidades que cineastas importantes me han brindado. Estoy intentando participar en proyectos de todos los géneros, en historias que me permitan demostrar mi potencial y entregarles lo que necesitan. Lo que más disfruto es desafiarme a mí mismo y colaborar con cineastas que compartan esa visión; esa es la parte divertida del proceso. Sé que confiar en un actor para un proyecto implica un salto de fe y una decisión vulnerable.
LS: ¿Es la dirección tu siguiente paso?
G.P.: Quienes me conocen saben que estoy obsesionado con el cine, pero creo que falta mucho para meterme en el papel de director. Ahora estoy disfrutando aprender todo lo que puedo de esta gente tan talentosa con la que siempre soñé trabajar, asimilando sus procesos y la realidad es que siento que estaría limitándome si ocupara la silla de director. Con toda seguridad llegará el momento en que dirija, pero no creo que sea pronto, ya que estoy disfrutando mucho de este paseo como actor.