Better Man es una película musical semibiográfica de 2024 que explora la vida del cantante británico Robbie Williams. Coescrita, producida y dirigida por Michael Gracey, utiliza una manera peculiar de presentar a Williams como un chimpancé generado por CGI. ¿Qué tal salió esto? Te contamos.
Reseña | 'Better Man': La biopic de Robbie Williams muestra la carga de la fama
La película biográfica es visualmente atractiva y refleja las luces y sombras de un ícono de la música pop, sin embargo no alcanza todo su potencial narrativo.
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Un retrato vibrante (pero superficial) del ícono británico
En esta biopic, Jonno Davies da vida a Robbie Williams a través de tecnología de captura de movimiento, añadiendo una dimensión simbólica que refleja los demonios internos y las contradicciones del ídolo pop.
Su interpretación es magnética y captura con precisión tanto el carisma como las sombras del artista, un aporte que enriquece la narrativa y resulta memorable, más no sé si suficiente.
El mundo musical de los 90 se recrea bastante bien, desde la efervescencia del britpop hasta el despiadado mundo de la industria discográfica.
Un punto álgido de la película es la rivalidad con Liam Gallagher y nos sumerge en el corazón de una de las batallas más icónicas de la música británica. Sin embargo, a pesar de estos aciertos, la película no profundiza lo suficiente en las complejidades psicológicas del artista, dejando al espectador con ganas de más y con muchas preguntas si no eres un fan de aquellas épocas.
'A better man' ¿es un gran musical?
En comparación con otros musicales como Bohemian Rhapsody o Rocketman, Better Man recurre a fórmulas comunes del género, pero carece de la ambición narrativa y la profundidad emocional de esas producciones.
Por ejemplo, mientras Rocketman aborda con valentía las luchas de Elton John, Better Man solo toca de forma superficial los temas de adicción y las decisiones complicadas de Robbie Williams.
A pesar de ofrecer momentos visualmente atractivos y una gran banda sonora, la película se queda corta al no explorar en profundidad los aspectos más complejos de su vida y carrera, dejando al espectador con una sensación de vacío.
Un Robbie Williams que influenció a toda una generación
La película acierta al retratar a Robbie Williams como un ícono de la música pop, aunque sacrifica el contexto más amplio de la industria en su época.
La mayor parte de la trama se enfoca en Inglaterra, dejando de lado lo que sucedía en Estados Unidos, donde artistas como Britney Spears, Michael Jackson y Christina Aguilera también dejaban su huella en la música pop.
Si bien destaca su capacidad para desafiar las normas de la masculinidad, proyectando irreverencia y vulnerabilidad, elementos que redefinieron el concepto de estrella masculina en los 90, no reconoce que este cambio no fue únicamente obra suya. A pesar de ello, logra subrayar cómo su éxito como solista marcó un punto de inflexión significativo, consolidando su legado e imprimiendo una huella duradera en la cultura popular.
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Y a todo esto ¿es un mejor hombre?
La película deja esta pregunta abierta. Si bien muestra a Williams enfrentando las expectativas sociales y lidiando con las presiones de la fama, el desarrollo de su personaje sigue girando en torno a "tocar fondo" como punto de inflexión. La relación conflictiva con su padre aporta un eje narrativo sólido y expone la complejidad emocional del artista, pero la falta de un análisis más profundo del impacto del patriarcado en su vida limita el alcance de esta exploración.
La inclusión de su madre y su abuela como figuras cruciales en su formación aporta una perspectiva interesante, aunque su relevancia disminuye conforme avanza la trama. Al final, todos los simbolismos permiten vislumbrar sus luchas internas, pero no responden plenamente a la cuestión central: ¿aprendió Robbie Williams a reconciliarse consigo mismo y a redescubrir su identidad?
Quizás la película no busca entregar respuestas definitivas, sino presentar al cantante como un hombre en constante lucha por ser mejor, tanto para los demás como para sí mismo.
Deben explorarse nuevos caminos para los musicales y biopics
Better Man nos presenta un Robbie Williams lleno de energía y carisma gracias a una banda sonora que resuena con fuerza. Sin embargo, la película se queda a mitad de camino en su intento de explorar las profundidades de su alma.
La decisión de utilizar un simio como alter ego es audaz, pero no logra trascender lo simbólico. Aunque es un paso en la dirección correcta, el filme no aprovecha al máximo el potencial de la vida de Williams para ofrecer una narrativa más compleja y conmovedora.
El género de los biopics musicales necesita arriesgar más, explorar nuevas formas de contar historias y profundizar en las emociones de sus protagonistas.
Veredicto: Una experiencia visual y sonora destacable que promete, pero no termina de presentarnos a un mejor hombre.
¿Cuándo se estrena 'Better Man' en México?
La película dirigida por Michael Gracey (quien también dirigió The Greatest Showman) se estrenará en cines de México el próximo 20 de febrero.
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