Influencers representan pérdida de 200 millones de dólares para marcas
Cien mil seguidores en Instagram y decenas de likes en fotos no bastan para ser un influencer exitoso. El trabajo soñado de los millennials requiere mantener un engagement real y básicamente un grupo numeroso de usuarios a quienes les interese ver tu estilo de vida en Instagram stories.
El problema con los influencers llegó cuando la aplicación se convirtió en un aparador para las marcas y éstas comenzaron a pagar por publicidad “orgánica”.
Después de esto todos quisieron ser influencers. Que las marcas les pagaran por mostrar sus productos en redes sociales. Así, las cuentas falsas y los números inflados se convirtieron en la técnica ideal para conseguir el pago de las grandes firmas de moda, entretenimiento, tecnología y estilo de vida.
Vamos por partes. Hay dos formas para engañar en Instagram. La primera es hacer perfiles falsos con el objetivo de aparentar ser “ influencer ” y que las marcas paguen para promocionar sus productos.
¿Cómo afecta a la industria? Las marcas están gastando más de 200 millones de dólares a influencers fake. Esto de acuerdo con el reporte que la compañía de marketing Captiv8 publicó en The Times , basándose en las cifras que las empresas pagaron en 2017 a "influencers" que resultaron ser cuentas falsas.
El estudio encontró que marcas pagaron 2 mil millones de dólares a influencers, de los cuales el once por ciento resultaron ser falsos. Esto representa una pérdida de 200 millones de dólares para marcas que utilizan a estas personas como herramienta de publicidad.
Pero eso no es todo. El fraude va más allá de los perfiles falsos (segunda forma de engañar a Instagram). Incluye el pago de apps que funcionan como bots y suben los seguidores de la persona a través de cuentas falsas. Así aparentan más "exposure”, factor que buscan las marcas.
Otra técnica es fingir que hacen campañas con marcas. Para hacerlo basta con utilizar el hashtag #ads para que marcas piensen que se paga por promocionar productos en el post. Esto funciona como gancho para atraer deals, y que efectivamente, reciban dinero a cambio de publicidad.
Por su parte, Instagram UK cambió las reglas para los posts de los influencers y los monitorea. En diciembre esta red social eliminó cientos de cuentas falsas y tiene planes de acabar con apps que ayudan a comprar seguidores.