Los zapatos más modernos no te hacen el mejor futbolista como tampoco un auto de varios millones de pesos te hace un buen piloto.
Y para prueba de ello este video, donde el conductor de un Lamborghini Aventador quiere ganar el paso en una reducida calle y sólo provoca un accidente que por fortuna no fue mayor.
Sin embargo, sí arruinó parte de su lujoso auto, ese que todos quisiéramos tener y que lo cuidaríamos, sin duda, mejor que él.