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20 señales de que no naciste para ser padre

(Des)afortunadamente no todos contamos con instinto paternal
lun 18 julio 2016 09:18 AM
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What to Expect When You're Expecting (Kirk Jones, 2012) - (Foto: What to Expect When You're Expecting (Kirk Jones, 2012))

AVISO: Esta es una nota humorística, cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. O no.

Si estás en los 20’s o 30’s es muy probable que tu Facebook esté repleto de fotografías de los hijos de tus amigos o conocidos y lejos de sentir ternura lo único que te provoca es pena ajena.

Ante esto realizamos una listado de 20 señales de que no naciste para ser padre

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1. Eres muy despistado, olvidas la cartera y celular frecuentemente, así que lo más probable es que se te puede olvidar tu hijo en algún lugar.

2. No puedes cuidar ni la planta que te regaló tu mamá.

3. Sientes más aprecio por tus mascotas que por los niños.

4. Te da asco la idea de cambiar un pañal.

5. Cuando te presentan a un bebé no tienes ni idea de qué decir. “Está cool”.

6. No deseas descuidar tus valiosas y amadas horas de sueño.

7. No sabes cuál es la manera correcta de cargar a un bebé.

8. No tienes ni la menor idea de porqué lloran. 

9. Te fascina consentirte con ropa, zapatos, gadgets y cualquier cosas que llama tu atención en las tiendas. 

10. No te gustan las mamávans. 

Leer: La gente impuntual es más exitosa y creativa

11. Te aburres en las fiestas de tus sobrinos. 

12. No sabes hacer voces o sonidos graciosos para agradarles a los niños y la verdad tampoco te interesa aprender.

13. Te alejas sigilosamente cuando ves a un niño y evitas a toda costa el contacto visual.

 

14. Tienes demasiadas cosas que hacer como para estarte preocupando por una persona más.

15. Las películas infantiles te provocan sueño.

16. No puedes mantener una relación amorosa estable por más de 6 meses.

17. Estás enfocado en tu carrera y dentro de tus planes no está el tener hijos.

 

18. Te pone de malas escuchar a un niño llorar. 

19. Le hablas a los bebés con el mismo tono con el que le hablas a tu perro.

20. No quieres dejar de hacer las cosas que te gustan.

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