Publicidad
Publicidad

Porsche vuelve a casa

Las 24 Horas de Le Mans equivalen a gloria y velocidad, atributos de Porsche y Chopard que regresan juntos a Francia
dom 08 marzo 2015 01:51 AM
-
Getty Images - (Foto: Getty Images)

La atracción de la carretera abierta, combinada con un paisaje evocador a través de pequeños poblados, recorridos a máxima velocidad por los autos deportivos más veloces que se hayan construido durante un día y una noche completos. Le Mans, Francia, se convierte en el epicentro de la velocidad durante un fin de semana al año desde 1923 para llevar a autos y pilotos al límite de su resistencia; y si ese límite queda lo suficientemente lejos, a un triunfo que quedará para la historia.

La idea es que para acercarse al triunfo no sólo basta ser rápido, sino frugal con el combustible y cuidadoso con el auto, el cual debe llegar hasta el final con la menor cantidad de fallas mecánicas que sea posible, sólo se debe parar para cambiar de piloto, cargar combustible y poner llantas nuevas.

Este rito repetido anualmente convoca un auténtico peregrinaje de pilotos y marcas constructoras de automóviles que buscan demostrar su superioridad y atrae hacia este tranquilo pueblito francés a quienes aman todo lo relacionado con la velocidad

Publicidad

Durante la mayor parte de su historia, el circuito estaba formado por caminos públicos, pero la reglamentación en cuanto a seguridad obligó paulatinamente a que se convirtiera en un circuito semipermanente, con unos cuantos tramos restantes de carreteras públicas.

En ese escenario han sucedido muchas de las más grandes batallas entre marcas de automóviles y pilotos, pero también la mayor tragedia, acaecida en 1955 cuando el Mercedes de Pierre Levegh perdió el control de su Mercedes-Benz 300SLR y murió al estrellarse contra la tribuna matando a 80 espectadores. 

Marcas como Alfa-Romeo, Bentley, Jaguar, Bugatti, Fiat, Aston Martin, Mercedes-Benz, Ford, Ferrari, Matra, Renault, Peugeot, McLaren han batallado sobre el asfalto del circuito de La Sarthe, como es conocida la pista de Le Mans, que desde 2000 ha presenciado el dominio de Audi, que ha triunfado 13 veces, incluyendo 2014; lo cual sería el récord absoluto... si no fuera porque Porsche ha triunfado en Le Mans en 16 ocasiones desde 1970, aunque antes cosechó varias victorias en las categorías de menor cilindrada.

El primer Porsche capaz de alcanzar el triunfo general en las 24 Horas de Le Mans fue el fabuloso 917K de 12 cilindros, un automóvil que planteó una nueva gama de retos para la marca de Stuttgart, ya que sus estudios aerodinámicos que buscaban la menor resistencia al viento eran perfectos para autos con motores pequeños, pero el gran poder del 917 exigía una administración más cuidadosa del viento para obtener la máxima estabilidad en la larga recta de Les Hunaudières de 6 km de longitud.

El triunfo llegó en 1970 y 1971 antes de que la federación cambiara las reglas, principalmente para sacar del juego al invencible 917 en sus versiones de cola corta K (kurzheck) o LH (langheck), que arrasaron con sus rivales en cuanta competencia se presentaron. De entre los personajes más importantes asociados al 917 estaban Steve McQueen con el que compartió el estelar en la película Le Mans y uno de los mejores pilotos al mando de un 917, el mexicano Pedro Rodríguez de La Vega, quien ya había ganado en las 24 Horas en 1968 conduciendo un Ford GT40.

Durante el resto de los años 70, Porsche conquistó el triunfo con variantes de su icónico deportivo de calle, el 911, de modo que los 935 y 936 fueron creados de acuerdo con las cambiantes reglas de la FIA (Federación Internacional del Automóvil), hasta que en los años 80 se permitió el retorno de los denominados Sport-Prototipo, similares en concepto al original 917, pero con motores basados en el seis bóxer del 911. Así nacieron el 956 y su gemelo 962, los cuales dominaron casi toda la década; al grado de que entre 1982 y 1986 Porsche ocupó todos los lugares del primero al quinto. A eso se le llama dominio de la competencia de velocidad más difícil del mundo.

En los años 90, las reglas volvieron a cambiar, exigiendo automóviles más similares a los de producción, dejando fuera a los prototipos del Grupo C, que reinaron durante la década anterior. La victoria más reciente de Porsche como equipo de fábrica fue en 1998, con el 911 GT1-98 e, inmediatamente después, Porsche se retiró oficialmente de las competencias y se concentró en la atención a sus clientes racing. Porsche produce más autos 100% de competencia que ningún otro fabricante.

Aunque se veía lejano, dentro de la firma siempre estuvo latente el retorno a Le Mans, el éxito competitivo de su marca hermana dentro del Grupo VW, Audi sólo hizo que ese deseo creciera. En 2013, Porsche anunció su retorno como equipo oficial, ahora con el ultramoderno prototipo 919 Hybrid, impulsado por una combinación de motor V4 turbocargado de combustión interna con un motor eléctrico en el eje frontal y avanzados sistemas de recuperación de energía cinética y térmica en forma de electricidad y así conseguir el menor consumo posible, lo que ahorra detenciones por combustible.

Aunque el esfuerzo sea grande y dedicado, nada garantiza el éxito, eso lo saben muy bien en Porsche, su larga trayectoria en las pistas le ha dado lecciones importantes. La actuación de los dos 919 Hybrid y sus pilotos en Le Mans 2014 fue sobresaliente, lideraron por varias horas hasta que una falla técnica en un auto lo dejó fuera de la carrera y el otro terminó en undécimo después de una larga estadía en los fosos siendo reparado. Sin importar el revés, no hay nada como caer luchando y Porsche lo sabe muy bien, ya vendrá junio del 2015

Chopard, de la mano de los gladiadores

La marca Chopard refleja la gran pasión por el automovilismo clásico y de competencia, la cual proviene de la enorme pasión de Karl-Friederich Scheufele, copresidente de la marca y apasionado coleccionista de automóviles clásicos; no por nada ha apoyado la competencia Mille Miglia histórica, llamada “la carrera más bella del mundo” y el Gran Premio de Mónaco histórico.

Un paso lógico fue la asociación de Chopard con Porsche para ser el cronometrador oficial de la Porsche Supercup; y por supuesto en la gran empresa que es el retorno a Le Mans, para lo cual Chopard lanzó una lujosa edición limitada llamada Superfast Porsche 919 Hybrid Edition, con un estilo high-tech evocador de la tecnología del veloz prototipo. Las manecillas y los gráficos hacen eco de los detalles del auto. Es animado por un calibre cronógrafo automático de manufactura Chopard 03.05-M, una máquina sublime que hace honor a otra. Sólo 919 afortunados podrán llevar esta pieza excepcional al final de su brazo.

Publicidad

Publicidad