Una obra artística sobre la dualidad se refleja en la nueva versión de la icónica Colonia de Acqua di Parma, una mezcla cítrica que evoca el aroma y el alma de Italia. De la mano del diseñador industrial británico Samuel Ross y de su estudio SR_A, con sede en Londres, la firma reinterpreta la fragancia con la que debutó, en 1916, con un aroma distintivo que perdura intacto hasta nuestros días.
La reinterpretación de un clásico de Acqua di Parma
La colaboración dio como resultado la Colonia Limited Edition, designed by Samuel Ross, en la que se reestructuran los códigos de diseño de ambas marcas para crear una obra totalmente nueva. La interpretación dinámica que ha proyectado el laureado artista en este lanzamiento de edición limitada es una oda al pasado canalizada a través de su mirada contemporánea para crear una visión del futuro.
“Siempre he admirado Acqua di Parma por su sofisticación y porque su comunicación visual es muy precisa. Esta colaboración crea tensión entre el futuro y el pasado y, aunque la fragancia existe desde 1916, considero que ha sido desarrollada para el urbanita, para el habitante citadino”, señalaba el propio Samuel Ross en un encuentro durante la presentación de la fragancia que se realizó en Miami, Florida.
Reconfortante y refinada, Colonia Limited Edition mezcla en una receta reconocible al instante limón radiante, bergamota de Calabria y naranja que comparten protagonismo con un toque de lavanda, rosa y romero, así como notas amaderadas de vetiver, sándalo y pachuli.
“Existe esa sensación de inmediatez cuando hueles la fragancia. Hay un espíritu de juventud asociado a ella”, recuerda Ross, también conocido por su marca A-Cold-Wall*, fundada en 2015, quien añade que para su nueva creación encontró inspiración en la arquitectura y personalidad de Londres y Milán, a partir de las que interpretó la fragancia estrella de Acqua di Parma.
Se basó en las estructuras de Renzo Piano y Richard Rogers y vislumbró el sol, eterna fuente de inspiración de la casa, acristalando el paisaje de una ciudad europea. Los puntos estratégicos de luz conformaron su visión. “En los últimos años, he dividido mi tiempo entre mi taller de Milán y mi estudio londinense de SR_A. Me he estado moviendo entre ambas ciudades y he podido disfrutar de su relación con la cultura y la arquitectura, algo que también formó parte de mi inspiración. Observas cómo está estructurada la ciudad y tratas de encontrar puntos de conexión, investigas quién hizo la planificación urbana y a los grandes arquitectos que vivieron allí y que les dieron forma a esos lugares”, relata.
Más allá de los brillantes arquitectos que trazaron las ciudades, Ross también observa la minuciosidad de esos detalles que permiten que esos lugares se sientan vivos: los colores. El brutalismo urbanístico de Londres se representa mediante un amarillo muy pigmentado, una nueva versión del emblemático color de la marca perteneciente al grupo LVMH que fue el punto de partida de esta colaboración, aunque también están disponibles los tonos verdes y naranjas.
Samuel Ross, uno de los primeros y más cercanos colaboradores de Virgil Abloh, considera que los aromas también forman parte importante de su proceso creativo. “Forman o distorsionan el ambiente y espacio. Siempre han influido, incluso en mis áreas personales. Considero que los aromas pueden remodelar un entorno en términos de cómo te sientes, y a mí siempre me inspiran”.