Una cuestión accesoria

LOUIS VUITTON

Infinita obsesión creativa

Una década después de su primera colaboración, Louis Vuitton y Yayoi Kusama crean una colección cápsula que ha fascinado al mundo.

Los mundos del arte y de la moda se han inspirado y nutrido mutuamente durante décadas, regalándonos creaciones que han terminado por convertirse en objetos de culto. Probablemente, el mejor ejemplo sea la colaboración entre Louis Vuitton –con Marc Jacobs entonces como director creativo– y la artista japonesa Yayoi Kusama, lanzada en 2012. A 10 años de aquel primer encuentro creativo, la maison francesa ha presentado una segunda colección que hace eco de aquellas primeras piezas gracias a la incorporación de los inconfundibles motivos de las obras de Kusama. La bolsa de viaje Keepall 45, confeccionada en la tradicional lona café estampada con el monograma de la marca, fue el lienzo perfecto para plasmar coloridos lunares con un efecto tridimensional pintado a mano, una pieza perfecta para llevar en la cabina del avión. La correa removible y ajustable, la cremallera de doble cierre con candado, las asas individuales y el logotipo LVxYK en el interior completan este diseño con vocación de clásico.

TIFFANY & CO.

Maestro de la forma y del movimiento

El broche Bird on a Rock, uno de los diseños más reconocibles de Tiffany & Co., es testimonio de una de las colaboraciones creativas más prolíficas de la historia.

El legado de algunas marcas está indisolublemente ligado a la visión y la creatividad de ciertos prodigios del diseño. Tal es el caso de Tiffany & Co. y el francés Jean Schlumberger, quien escribió un nuevo capítulo en el diseño de joyas cuando comenzó su legendaria colaboración con la casa en 1956. Gran parte de su inspiración provenía del mundo natural –del cielo y el mar a la flora y la fauna– y su genio fue alimentado por el suministro ilimitado de las mejores gemas de colores que fueron puestas a su disposición. Uno de sus diseños más célebres es el broche bautizado como Bird on a Rock, una pieza que desde su presentación generó expresiones de sorpresa y dibuja sonrisas en el rostro de quien las admira. La figura de un pájaro que descansa sobre una imponente gema sigue siendo hasta nuestros días una de las creaciones más reconocibles de la firma estadounidense y complemento de los looks más admirados, como el de Michael B. Jordan en la más reciente ceremonia de entrega de los Oscar.

DIOR

Volver al origen

Resultado de una colaboración entre Dior y Mystery Ranch, esta nueva versión de la Saddle Bag es una invitación para lanzarse a la aventura.

La Saddle Bag –esa bolsa presentada por primera vez en la colección PV2000 diseñada por John Galliano– se ha convertido en un ícono de Dior. Con el paso de los años, se han visto múltiples adaptaciones, pero sus distintivas líneas curvas –que recuerdan una montura– se mantienen y siguen siendo su sello característico. Para esta temporada, Kim Jones, director artístico de Menswear, decidió colaborar con Mystery Ranch, una firma establecida en Montana que diseña y manufactura resistentes accesorios para los espíritus más aventureros. El resultado es una bandolera ajustable que mezcla nylon Cordura, piel y una hebilla magnética, y que resguarda un compartimento con cremallera. Ideal para la exploración urbana o para aventuras al aire libre, este nuevo imprescindible del armario masculino es un recordatorio de la conexión de Christian Dior con el campo, la tierra y las “cosas simples y naturales”.

PANERAI

Precisión italianaCon un origen ligado a las operaciones submarinas del ejército italiano,

llega hasta nosotros una renovada versión del Radiomir de Panerai.

Destinado al Primer Cuerpo Submarino de la Armada Real Italiana, los primeros prototipos del icónico Radiomir de Panerai fueron lanzados en 1936. El principal objetivo de su diseño era permitir una fácil lectura debajo del agua y resistir las duras condiciones de uso a las que eran sometidos. Al día de hoy, prácticamente todos sus rasgos –caja de acero patinado con forma de cojín, esfera granulada y degradada, números e índices luminiscentes, asas soldadas a la caja, movimiento mecánico de cuerda manual y una correa resistente al agua– se mantienen intactos y siguen siendo un homenaje al diseño italiano sencillo y refinado. En 2023, la casa italiana presenta el Radiomir Tre Giorni PAM01335 que se mantiene fiel a su esencia y cuyo tono azul le confiere una apariencia vintage resaltada por su correa de piel de becerro con pespuntes en contraste. Con su movimiento mecánico calibre P.6000 ofrece una reserva de marcha de hasta tres días y la oportunidad de llevar un fragmento de historia en la muñeca.

BOTTEGA VENETA

Lujo entrelazado

Estrella de los archivos históricos de Bottega Veneta, el intrecciato se mantiene como un imprescindible de las colecciones de Matthieu Blazy.

Pocas marcas logran convertir una técnica y un material en su seña de identidad, alejándose de los logotipos y la parafernalia mercadotécnica. Bottega Veneta, fundada en Vicenza por Michele Taddei en 1966, es una de ellas gracias a los accesorios y prendas que han hecho del intrecciato un lenguaje que los admiradores del lujo sereno de todo el mundo dominan sin problema. Esta técnica –que consiste en tejer a mano tiras de cuero– comenzó a formar parte de las creaciones de la marca a finales de los años 70 y a lo largo del tiempo se ha incorporado a bolsos, pantalones –como esos amarillos presentados por Matthieu Blazy en la colección Resort 2023– o estos botines que dan una muestra de las proezas que sus artesanos son capaces de lograr. Es así como la discreción de una creación exquisita se vuelve el objeto del deseo de las miradas entrenadas.

Linda farrow x DRIES VAN NOTEN

La fusión de la luz y el color

Vistos a través de la mirada de Dries Van Noten, los clásicos lentes de aviador se convierten en un colorido accesorio cargado de estilo

y personalidad.

Reinterpretar un clásico manteniéndose fiel a la propia filosofía de diseño es, probablemente, uno de los mayores retos a los que un creativo puede enfrentarse. Para su colaboración con la firma británica Linda Farrow, el diseñador belga Dries Van Noten tomó el clásico modelo de aviador –esos lentes creados durante la década de 1930 para proteger los ojos de los pilotos de los rayos del sol– y le infundió la intensidad del color y la versatilidad de materiales como el acetato, el acero inoxidable y el cuerno. El mismo Van Noten asegura que lo que más disfruta de su trabajo es crear piezas que encuentren el equilibrio entre belleza, artesanía y función, de modo que puedan convertirse en parte de la vida de las personas que las utilizan. “Disfruto jugar con los colores, las texturas y la luz de manera que el resultado sea capaz de evocar, más que de provocar”, ha comentado.